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San Ignacio, Sinaloa.- Son dos años los que el sector primario de San Ignacio siente repercusiones por la sequía, en la que el año pasado murieron más cabezas de ganado que el año anterior, y en estas primeras semanas ya se reporta la muerte de animales, apuntó Martín Ignacio Zúñiga Manjarrez.
El presidente de la Asociación Ganadera Local de San Ignacio expuso que el sector requiere del apoyo de los gobiernos, tanto estatal como federal, principalmente para la cuestión del agua y de la alimentación por lo apremiante de las necesidades que tienen las comunidades del municipio, ya que no solo repercute en la actividad, sino también en el consumo humano del agua.
“Algo no sé qué sucedió, que las pasturas estaban débiles, con poca fuerza y desde noviembre, ya sentíamos que el ganado joven se nos estaba enflacando, se nos comienza a morir el ganado, ya en los pueblos ya hay mortandad de ganado, no mucha, pero sí hay”.
Explicó que en noviembre del año pasado se les retiró maquinaria que tenían para hacer pozos, con lo que han empezado a sufrir los estragos de la falta del líquido, ya que, aunque llovió bien el año pasado, los niveles del río Piaxtla no son buenos, lo que ha influido en que el ganado comience a enflacarse y con ello, morirse.
Zúñiga Manjarrez aplaudió la intención del gobernador Rubén Rocha Moya de lanzar una solicitud de declaratoria de zona de desastres por sequía a municipios de Sinaloa, incluido San Ignacio; al ser un problema que además repercute en el público consumidor, que es quien solicita los productos.