?México.- Un nuevo documento relacionado con el escándalo de “Rápido y furioso” arrojó el primer nombre de un funcionario de alto nivel del Departamento de Justicia que autorizó algunas de las acciones del fallido operativo. Lanny Breuer, asistente del fiscal General Eric Holder para la División Criminal, dio su permiso para intervenir las conversaciones telefónicas de un presunto traficante de armas vigilado bajo el controvertido programa puesto en marcha por la Oficina para el Control del Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF, por sus siglas en inglés) en Phoenix.
Según los reportes, a través del “Rápido y furioso” se permitió de forma deliberada que miles de armas ingresaran de forma ilegal a México, muchas de las cuales terminaron en manos de los cárteles de la droga y aparecieron en escenas de crímenes, incluyendo el asesinato de un oficial de la Patrulla Fronteriza.
La revelación del documento por parte del Comité de Supervisión Gubernamental del Congreso de EU -y que reproduce CBS- se da en medio de la insistencia de los congresistas Chuck Grassley y Darrell Issa de dar con el funcionario qué autorizó todo el operativo.
“En virtud de la autoridad que enviste al Fiscal General de los Estados Unidos (Eric Holder)… el Fiscal General… ha designado a oficiales en la División Criminal para autorizar la intercepción de comunicaciones verbales o electrónicas”, se lee en el documento firmado por Breuer y dirigido a Paul O’Brien, de la oficina de operativos.
En la audiencia del pasado martes, el republicano Darrell Issa se empeñó en acorralar al fiscal General Holder, quien se mostró esquivo y hasta balbuceante cuando Issa le preguntó si acaso dos de sus principales colaboradores estaban al tanto de la operación Rápido y furioso.
“No estoy seguro… Supongo que no…”, fueron algunas de las respuestas ofrecidas por Holder cuando el congresista le preguntó sobre la eventual responsabilidad de su procurador adjunto, James Cole, y del jefe de la división criminal, Lenny Breuer, en el operativo.
