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Guasave, Sin.- Tenía apenas 25 semanas de gestación cuando ella y su hermanito quisieron conocer este mundo, eran el tercer embarazo de su mami, desafortunadamente, los dos primeros fallidos; el pequeño varoncito no sobrevivió, pero Lucía Jaqueline está hoy en casita.
Este jueves, la bebé fue dada de alta del Hospital Regional número 01 del IMSS en Culiacán, tras casi cuatro meses en la clínica superando todo pronóstico que le generaba su prematurez.
“En medio de todo este tiempo hubo dudas, temor, angustia, días sin dormir, días que literalmente la pasábamos con un nudo en la panza de desesperación… Pero también ha habido días de GLORIA como hoy… Días donde literalmente hemos visto a Dios obrar y cambiar diagnósticos”, escribió la familia.
El embarazo
Todo el embarazo de Raquel, la bendecida madre de Lucía, fue de alto riesgo. El 25 de agosto de repente empezaron los dolores, ella desconocía que los bebés querían salir antes de lo planeado.
De urgencia se trasladaron a la ciudad de Culiacán donde no pudieron detener a los bebés que fueron catalogados como prematuros extremos y realizaron la cesárea. Inmediatamente ingresaron a los pequeñitos a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales y fueron intubados con un ventilador mecánico para ayudar a sus pulmones; 4 días después el bebé varón falleció.
Lucía Jaqueline desde ese día, se ha aferrado a la vida, nació pesando 680 gramos, a sus poco 3 meses y una semana de nacida, la pequeña considera por sus padres como un milagro de vida, ya se encuentra en donde recibirá todo el amor de sus padres, su hogar.