Guasave, Sin.- “Que la vida y Dios se encarguen de él”, dijo Julieta, madre de Idelfonso o “Pepe”, como le llamaban sus amigos al menor de 13 años de edad que se ahogó en las aguas del canal Alto desde el sábado pero que este lunes fue encontrado.
El primero de tres hijos de la señora Julieta, el único hombre, le había pedido permiso a su madre para ir al “tubo” un lugar donde normalmente los niños acostumbran a bañarse en Estación Naranjo, sin embargo, otro joven familiar suyo lo invitó al canal Alto, le dijo que se tirara a lo que el menor se habría negado bajo el argumento de que no sabía nadar.
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“Es un dolor muy grande. Él me pidió permiso para ir a otra parte, esta persona que me lo empujó me lo invitó para acá para los borbollones, él le dijo que no, que no sabían nadar y lo empujó, dijo que para que se le quitara el c…, él lo mató, mi hijo era bueno, él era un niño y no merecería esto, que Dios se encargue de él o que se pudra en la cárcel, porque no me va a regresar a mi hijo, en su consciencia va llevar todo este daño tan grande que nos ha hecho”, condenó la madre desconsolada.
En el lugar donde cayó Idelfonso había otro niño, un menor, quien se lanzó adelante porque “Pepe” manoteaba, se metió y lo jaló, pero el cuerpo del adolescente dejó de moverse y se le hizo pesado, ya no lo pudo jalarlo.
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La madre de Idelfonso, de 13 años de edad, cuyo cuerpo acaba de ser encontrado por buzos de la Semar, lamentó que al joven de 22 años no lo puedan mantener retenido por más de 36 horas, que se cumplieron este lunes, pues eso implica que se dé a la fuga antes de que haya una orden de aprehensión.
La afligida madre dijo que la justicia se la deja a Dios y a las autoridades, a pesar de que eran familiares, les ha causado un gran dolor.
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“Pepe” era un niño de secundaria, inquieto como muchos de su edad, que tenía anhelos y sueños de ser un gran beisbolista, al que su madre compró con muchos sacrificios un par de spikes, “andaba tan volado” que le pidió tomarse una fotografía y subirla a su perfil.