Los Mochis, Sin.- En la zona centro-norte de Sinaloa, para 6 municipios con presencia de la etnia yoreme-mayo, la Semana Santa tiene un gran significado y relevancia, debido a que en sus uso y costumbre, estos días están llenos de espiritualidad y signos que les fueron heredados por sus antepasados y sobreviven hasta nuestros días.
Un claro ejemplo de la conservación de sus tradiciones, es el conti de Viernes Santo que se realizó en el centro ceremonial del ejido 5 de Mayo, allí, los judíos de Mochicahui, comunidad perteneciente al municipio de El Fuerte, acudieron al emblemático lugar a realizar sus danzas.
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Para los pueblos originarios la separación de municipios des algo inexistente, ellos mantienen su propia organización que les brinda un sentido de identidad y unidad.
Así, este viernes los judíos, hombres-demonio de la etnia yoreme, acudieron caminando desde Mochicahui y ataviados con su indumentaria tan característica hasta el ejido 5 de Mayo, otros más se trasladaron hasta el centro ceremonial de Zapotillo.
En ambos lugares considerados “sagrados” fueron recibidos por las autoridades indígenas y fiesteros u organizadores de la festividad, a través de su lengua mayo se comunican y dan la bienvenida a los judíos de otros lugares para ingresar al centro ceremonial.
El contingente de indigente está en integrado en su mayoría por hombres de todas las edades, pero la imagen multitudinaria sorprende, por la cantidad de niños que participan junto a sus padres y abuelos en el conti.
En el caso de ml centro ceremonial del ejido 5 de Mayo, se ingresó al sitio donde se observó la imagen de Jesús “aprehendido” y a punto de ser enjuiciado para posteriormente ser crucificado.
Al exterior los judíos “tiraron” la cruz de madera colocada en el patio del centro ceremonial en medio de danzas y cantos yoremes.
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Después, los participantes disfrutan de comida tradicional, para retomar fuerzas y acudir a las casas a seguir “tirando” el resto de las cruces que fueron colocadas en sus patios por motivo de la festividad.
Será este sábado cuando se lleve a cabo la corrida de gloria y quema de máscaras, rituales que representan la resurrección de Jesús y la conversión de los judíos al catolicismo
