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Los Mochis, Sin.- La procuradora del sistema DIF Ahome, dio a conocer que existe un protocolo para detectar casos de abuso sexual en menores de edad en las escuelas, pero lamentó que los docentes no sepan cómo actuar ni canalizar estos casos a las diferentes dependencias, así lo dio a conocer Claudia Josefina Gámez Verduzco.
La funcionaria subrayó que el protocolo indica una serie de procedimientos, los cuales deben ser tomados en cuenta, uno de los principales es anotar mediante una bitácora el comportamiento del menor de edad dentro el aula; posteriormente, comunicar a sus padres de familia o, bien, a la Procuraduría de cualquier DIF, incluso, Fiscalía General de Justicia del Estado de Sinaloa.
Agregó que la Secretaría de Educación Pública y Cultura (SEPyC) debe capacitar a los maestros acerca de este protocolo, porque la escuela es el lugar donde los menores de edad se sienten protegidos, más si el agresor está en el hogar.
Sin embargo, hay miedo de los docentes a denunciar por temor a una represalia, lo que limita que los menores puedan ser protegidos por las instituciones y la ley.
“Yo, maestro de clases, detecté que mi alumno todos los días viene o con signos de violencia invisible o tiene temor ante cualquier ruido, si yo dejé caer un borrador, u otro niño hace algún golpe, se sobresalta cuando no pasaba, si el niño tiene una dificultad o miedo, temor de ir al baño, quedarse solo, entonces los maestros tienen que ser observadores”, puntualizó.
La funcionaria señaló que antes de llevar a cabo un proceso de denuncia ante cualquier instancia, lo primero sería brindar terapias con el psicólogo o trabajadora social de institución, acompañando al menor.
En algunos de los casos cuando se demuestra la agresión por los padres de familia, el docente tiene la obligación moral de acompañarlo para interponer una denuncia ante el Ministerio Público.
