Culiacán, Sin.- Más allá de los prejuicios y estigmas que -históricamente y muchas veces- se tiene por error sobre los policías, para Judith son sinónimo de esfuerzo y superación personal: es la historia de Judith.
La joven cadete comenzó a estudiar hace dos meses en la Universidad de la Policía y aspira a convertirse en una agente de la Policía Estatal Preventiva (PEP).
Le está poniendo muchas ganas y es de las más participativas en el salón, pero además, no le tiene miedo a los retos que le presente la profesión.
Asegura que el deseo de portar el uniforme fue inspirado por su padre, un exmilitar que al buscar estabilidad laboral decidió dejar las filas castrenses y convertirse en policía municipal, eso le permitió tener más tiempo para su familia y estudiar una carrera, ejemplo de que “cuando se quiere se puede”.
“Yo siempre he tenido el carácter de mi papá, he tenido la formación de él y mi papá anteriormente de ser policía fue militar, hubo un cambio en el que los militares se trasladaban mucho y el decidió hacer un cambio como policía municipal para quedarse donde estábamos y ahí encontró mayor estabilidad tanto en lo económico como lo familiar, cuando yo vi esa estabilidad fue lo que me impulso”.
Dijo para luego añadir:
“Mi papá inició desde cero, se superó como persona, laboral y económicamente, terminó la secundaria y hoy en día es licenciado en Administración y para mí es un gran ejemplo”.
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-¿Te han dicho que es muy peligroso?
“Claro, así es, de hecho él mismo me dijo que si tomaba esta decisión tenía que cuidar mucho mi seguridad y mi vida, pero como a él también le apasiona, me apoyó en esto”, comentó a Línea Directa.
Cabe destacar que, en el actual ciclo escolar el número de mujeres inscritas en la oferta educativa de la Universidad de la Policía pasó de 112 a 227, en una comparativa del año 2021 y 2022.
