Culiacán, Sinaloa. Miguel Taniyama, uno de los organizadores de “Jalemos con la banda”, no ocultó su emoción ante el impacto y la respuesta de los culiacanenses en este evento que busca ayudar a más de 800 familias afectadas por la crisis económica derivada de la inseguridad.
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Entrevistado en la segunda emisión de Línea Directa, resumió el espíritu de la jornada.
“La verdad ha sido una respuesta increíble, todo el apoyo a los músicos, a los meseros, estamos muy agradecidos de que la gente de Culiacán haya respondido al llamado, de que vengan, compren, cooperen y el gran mensaje es construir paz, creo que esa parte queda lista, queda muy fortalecida para los eventos que vienen, volvemos a tomar las calles, volvimos a construir nuestra ciudad y agradecido con Dios”, expresó.
Taniyama destacó la importancia de la participación ciudadana para hacer frente a las adversidades.
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Música y esperanza: una postal inolvidable
El momento más emblemático del día ocurrió frente a la catedral de Culiacán, donde 350 músicos se unieron para interpretar “El Sinaloense”, un acto que Taniyama describió como “una postal increíble”. Este gesto, dijo, simboliza la resiliencia y el orgullo de la comunidad en tiempos difíciles.
“Son más de 800 familias a las que vamos a ayudar con este evento, agradecido con toda la gente que se ha dado cita, fue muy bonito ver a 350 músicos al pie de la catedral tocando al unisonó el sinaloense, fue una postal increíble y agradecido con eso”, precisó.
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Un festín solidario que voló
Además de la música, el evento se destacó por la preparación de una tonelada con 200 kilos de aguachile, elaborado desde las 5:00 de la mañana con un manejo higiénico impecable.
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Este platillo, explicó Taniyama, fue un homenaje a los músicos y meseros, quienes han sido duramente golpeados por la crisis reciente.
“El aguachile prácticamente voló. Fue un éxito total y una muestra más del apoyo de nuestra gente,” comentó con orgullo.
El inicio de algo más grande
Taniyama aseguró que el éxito de “Jalemos con la banda” marca el comienzo de nuevas iniciativas para fortalecer a la comunidad: “Esto nos deja listos y fortalecidos para los eventos que vienen. Recuperamos nuestras calles, nuestra ciudad, y con ello, unimos a nuestra gente.”
Con música, comida y un mensaje de esperanza, el evento demostró que la solidaridad puede ser un motor poderoso para construir paz y unidad en Culiacán.
“Agradecido con Dios y con cada persona que se dio cita hoy. Esto es solo el principio,” concluyó Taniyama.
