Los Mochis, Sin. Desesperadas, este lunes madres de familia colocaron candados en la puerta de acceso principal e impidieron clases en la escuela primaria Club de Leones ubicada en la colonia Texas para exigir el despido definitivo del subdirector, quien es acusado por una maestra del plantel de presuntas conductas inapropiadas.
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A esta segunda manifestación posterior a la realizada el pasado viernes acudió la supervisora escolar María del Rosario Díaz Harada, quien reiteradamente planteó a las mamás inconformes que permitieran a los maestros dar clases, ya que las autoridades sindicales piden realizar una nueva investigación del caso después de que en la anterior el jurídico de la Sepyc determinó que no había elementos que demostraran su responsabilidad, pero las madres se mantuvieron inflexibles en su postura.
Incluso, las madres se indignaron al informarles la supervisora que el subdirector goza de permiso que él solicitó tres días para no presentarse al plantel porque teme por su integridad, pues lo que ellas exigen es que la Sepyc proteja a sus hijos de un posible riesgo por su presencia, por lo que no aceptan que lo haya reinstalado en el cargo.
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“Si se lo hizo a la maestra qué no les puede hacer a los niños”, “no se vale, mejor ni diga nada porque está quedando peor al decir que él pidió permiso”, “lo están cuidando”, externaron las mamás.
“No lo estamos cuidando, simplemente atendimos una petición de él, y yo les garantizo que él no va a estar aquí en lo que nos vamos de vacaciones”, respondió la supervisora
“Si usted ahorita en este momento no puede dar un resolutivo, hágalo saber ante quien lo tenga que hacer saber porque a final de cuentas aquí vamos a estar hasta que nos den un veredicto final”, sentenciaron las inconformes.
Además, las madres manifestantes pidieron al resto de maestros del plantel que les expresaran si apoyaban al subdirector o a los niños y a la maestra afectada, ante lo cual los docentes respondieron que lo único que desean es que la situación se resuelva pronto en beneficio de los alumnos.
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Las madres de familia aseguran que desde que el subdirector ingresó a laborar a este plantel en este ciclo escolar, presuntamente ya tenía antecedentes de agresiones sexuales cometidas en otras instituciones educativas, mientras que la maestra, quien tiene 10 años laborando en la institución siempre ha sido ejemplar e intachable.
Ante la falta de acuerdo para permitir clases, la supervisora escolar levantó un acta de lo sucedido para notificar a las autoridades educativas superiores sobre la postura y demanda definitiva de las madres de familia.
