Culiacán, Sinaloa.- A no enrarecer con una mala comunicación un proceso de rendición de cuentas que ha marcado la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y solventar las observaciones, llamó el diputado presidente de la Comisión de Fiscalización del Congreso del Estado, Sergio Mario Arredondo Salas.
Lo anterior, después de que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) determinó que la Universidad Autónoma de Sinaloa “infringió la normativa” e “incumplió con sus obligaciones de transparencia” en el ejercicio de sus recursos durante el año 2022, generando un probable daño al erario por 128 millones de pesos.
El organismo federal también indicó que se identificaron recursos ministrados y susceptibles para su fiscalización en la UAS por 7 mil 082 millones 540 mil pesos, de los cuales 2 mil 296 millones 856 mil pesos fueron aportados por el Gobierno del Estado.
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A raíz de esto, el dictamen arrojó 36 resultados, de los cuales en 15 no se detectaron irregularidades, 9 se solventaron durante el desarrollo de la auditoría, 12 generaron dos recomendaciones, una promoción del ejercicio de la facultad de comprobación y 9 pliegos de observaciones.
Fue justo en estos 9 pliegos donde se encuentran los montos pendientes por aclarar y que podrían significar un daño al erario por un total de 128 millones 382 mil 420.28 pesos.
Ante ello, el legislador, advirtió que pueden ser graves de no ser solventadas estas observaciones como es el caso de sobresueldo por encima de los tabuladores establecidos y de los anexos de ejecución que fueron suscritos las autoridades tanto con el gobierno estatal y federal, pues destacó que no se trata de minimizar nada, si no que con seriedad se atiendan las observaciones que ahí están planteadas.
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“El llamado es que no enrarezcan con una mala comunicación un proceso de rendición de cuentas que ha marcado la ASF, las observaciones ahí están y son de orden público, eso es en principio, no hay que decir ‘no hay nada que decir no hay nada que atender o ya todo está resuelto, mejor que con seriedad atiendan las observaciones que ahí están, que presenten los elementos de comprobación que permitan atender cada una de ellas, algunas independientemente del porcentaje sí son necesarias de atender y pueden ser graves”, dijo.
Arredondo Salas también exhortó a cambiar la postura que tanto ha dañado la imagen de la UAS, pues consideró que se necesitan autoridades universitarias con un espíritu de rendición de cuentas, no que estén haciendo una interpretación de las formas y las leyes.
Por último, puntualizó que lo realmente grave no es que exista una observación, sino que se tengan autoridades universitarias que persistan, que insistan en una postura de opacidad en cuanto a los recursos que la sociedad entrega para el funcionamiento de la institución.
