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Guasave, Sin.- La legalización de todo tipo de drogas, no solo de la mariguana, es el camino para acabar con la inseguridad, aseveró Gerardo Fernández Noroña, diputado federal por el PT, es evidente que la droga se cotiza muy alto, tienen cantidades para comprar armamento poderosísimo, para incluir a jóvenes sin oportunidades y meter en nómina a los policías, lo que redunda en un círculo vicioso que les da mucha fortaleza.
Dijo que es momento de abrir la discusión de la legalización de las drogas, aún cuando Estados Unidos que ya es parte del ciclo de reproducción de ese capital, no como lavado de dinero sino como economía formal, podría oponerse por ser el principal beneficiario tanto del consumo como del circulante.
“Es evidente que el poder del crimen organizado es el poder económico, tienen cantidades industriales de dinero, entonces es un círculo vicioso, siempre he tenido resistencia al planteamiento de la legalización de todo tipo de drogas, pero creo que por ahí es el camino, también veo que Estados Unidos que es el gran consumidor de todo el mundo y el principal beneficiario económico, en el momento en que nosotros dijéramos que se legalizan, nos acusarían de narco estado, entonces es un acuerdo que tendríamos qué hacer con Estados Unidos pero como son muy hipócritas, eso dificulta mucho”, señaló.
Todas las drogas, puntualizó, no hay otra forma de quitarles el poderío económico, además de plantearse la eliminación de carencias, pues está comprobado que las personas que caen en estos vicios tienen que ver con problemas sociales fuertes: de maltrato y desigualdad; al legalizarse la posibilidad de que caigan será menor.
“Los narcos muertos de la risa llegan a ofrecerles a los policías, 10 veces más o 100 veces más que lo que ganan o mil veces más si fuera el caso, cuánto les puedes pagar a los policías que supere ésto”, aseveró.
En este sentido comentó que está leyendo El último Trago del periodista Edgardo Cozarinsky donde habla de los 13 años en los que estuvo prohibida en Estados Unidos la venta de alcohol, lo que presentó una elevación enorme del crimen, de ahí que planteó que se pueda abrir una discusión al respecto.
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Fernández Noroña acusó que el vecino país no ha movido un solo dedo para desmantelar a los cárteles de la droga, ni está tratando el tema como un problema de salud pública, cuando saben que lo es, cada que hay una masacre como la ocurrida recientemente en Texas, dicen que están hartos, pero no paran la venta ilegal de armas.
