Mazatlán, Sin.- La falta de una política pública que garantice la construcción y mantenimiento de infraestructura, y la insuficiente inversión en este rubro, está provocando que México no avance a la velocidad que se requiere, consideró el presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, Francisco Solares Alemán.
Entrevistado en Mazatlán, a donde acudió para encabezar la reunión regional de la zona noroeste de CMIC, consideró que en el país debe haber un organismo para la planeación de obras que no sean para un sexenio, sino que defina el crecimiento en un horizonte más lejano.
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Mencionó que en los últimos 13 años la industria de la construcción cayó, y aun cuando este año se prevé lograr un incremento en la inversión de obra hasta en un 6% respecto al año pasado, todavía será insuficiente para al menos llegar a los niveles que se tenían en 2019, es decir, antes de la pandemia, cuando se paralizaron todos los sectores de la economía.
“Si comparamos del 2008 al 2021, hemos disminuido nuestra facturación en 34%, o sea que la tendencia a la baja es de los últimos años. Hay varios factores. El principal es la inversión en la infraestructura que nos falta en el país; la básica: carreteras, aeropuertos y puentes; pero también la social: escuelas, hospitales; e incluyo la vivienda, que es la que nos permite habitar, no ha sido suficiente”.
Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción
El líder de los constructores organizados del país, reveló que la inversión privada representa el 80% de las obras de infraestructura, y el 20% es inversión pública.
Comentó que a nivel nacional apenas se destina el 2.2 del PIB a la infraestructura, cuando en una economía emergente como la de México, se debería estar invirtieron un 5% mínimo.
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“Ningún gobierno ni el de Estados Unidos tiene los recursos necesarios para poder mantener y renovar su infraestructura, pero sería conveniente que se generaran las políticas para que pudiéramos tener la infraestructura que necesitamos lo más rápido posible, de manera oportuna, y esas políticas tienen que ver con la participación de los dineros privados”.
Francisco Solares Alemán también cuestionó que el Gobierno Federal haya calificado como obras de seguridad nacional los proyectos como el Tren Maya, la Refinería 2 Bocas, el aeropuerto Felipe Ángeles o los Bancos del Bienestar, y con ello el Ejército se encargó de los trabajos, cuando insistió en que el gobierno debe de gobernar y los constructores realizar las obras.
