Culiacán, Sinaloa. – El documental que le realizó History al sacerdote Héctor Orozco Gutiérrez, mejor conocido como el “Padre Jeringas”, por su don de la bilocación es un reconocimiento a toda su labor que hace con los enfermos y con toda persona que busca un acercamiento con Dios, opinó el vocero de la Diócesis de Culiacán, Esteban Robles.
Externó que esto habla del bien que se puede hacer a través de la vocación y lo que el padre Héctor Orozco ha hecho para los sacerdotes es un ejemplo, es modélico el hecho de atender a los enfermos en horarios y en momentos donde no es fácil para todos, y pues para la diócesis de Culiacán esto es como un reconocimiento.
“Pues para nosotros es como un reconocimiento a toda su labor, y, sobre todo, para la labor de los sacerdotes que, como él, pues también trabajan incansablemente”.
¿Usted coincide con lo que dice el padre Orozco, que es Dios quien le da esa situación de estar en dos lugares a la vez?
“Todos los dones que se reciben en la vocación que tenemos obviamente que es Dios, porque somos instrumentos solamente, entonces coincido con lo que dice el padre en ese aspecto”, sostuvo.
En ese sentido, el padre Esteban acotó que no solamente eso, pues el saber reconsiderar a las personas con Dios, el ayudarles estar más cerca de Dios pues definitivamente es Dios que ilumina.
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Finalmente, dijo que el “padre jeringas” es un sacerdote ejemplo en muchos aspectos por su amor incasable hacia el prójimo en estos tiempos que se ocupa conocer la palabra de Dios, pero, admitió que en lo persona no le ha tocado verlo en dos lugares distintos a la vez como asegura la gente.
En entrevista por separado, el padre Saúl Norzagaray Flores reconoció que fue un reportaje muy ilustrativo de la vida real del padre Héctor Orozco quien tiene el don de sanación, incluso el “padre jeringas” es un sacerdote muy sencillo y que se debe de tomar en un sentido más que nada para avivar la fe, para retomar el camino del señor para interpelar por muchas personas en este momento.
“El trabajo del padre, más que un trabajo es una labor, un servicio pues muy loable, siempre estar con personas pues más necesitadas, los enfermos, lo vemos en los hospitales, en las funerarias, en los lugares más apartados, esa es la labor, el servicio, la entrega de un sacerdote íntimamente identificado con Jesús, ahí es un reflejo de Jesús en la persona del padre Héctor, expuso.
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Saúl Norzagaray insistió que el padre Orozco es muy sencillo y si le preguntan de la bilocación y de algunos otros momentos de su vida que ha actuado Dios por medio de él en favor de otras personas de igual manera él es muy sencillo y humilde y nunca se expresa más allá, pero es de esta manera como se manifiestan estos dones y regalos de Dios.
Hay que destacar que el “Padre Jeringas” está asignado a la parroquia de San Judas Tadeo en la ciudad de Culiacán. Fue el cuarto de 16 hijos procreados por Alfonso Orozco Díaz, de oficio zapatero y su madre, Guadalupe Gutiérrez Zambrano, quien murió a los 103 años, de ellos sobreviven 7. Nació un 25 de enero de 1942 en León, Guanajuato y a los 11 años ingresó al seminario, tiempo después fue asignado a Sinaloa, por eso posee las dos “nacionalidades”.
