Culiacán, Sin.- Por dejar sus compras de Navidad para última hora, miles de culiacanenses se encontraron con un Centro de la ciudad abarrotado de personas que se desplazaban frenéticamente en busca de los regalos prometidos.
Cargando más de tres bolsas, transitaban por el primer cuadro, entrando y saliendo tanto de zapaterías como de tiendas de ropa y juguetes.
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Particularmente destacables fueron las extensas filas de aquellos que se dirigían a recoger los juguetes que habían apartado y pagado en cuotas, debido a que la fecha límite para liquidar y recoger en muchos casos fue hoy.
El sonido persistente de los vehículos, el silbato del agente de Tránsito intentando restablecer el orden en el caos urbano y los llamados de algunos establecimientos con un entusiasta “¡pásele! ¡pásele!” resonaban de manera continua.
En esta ocasión, las tiendas chinas fueron ampliamente visitadas, ya que los compradores buscaban desde audífonos, bocinas y accesorios para celulares hasta mochilas, todo a precios económicos. En algunas de estas era la locura.
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“Con permiso, con permiso, con permiso”, se escuchaba a los clientes abriéndose camino en los pasillos.
En las tiendas de las plazas comerciales, el sonido constante de las cajas registradoras resonaba mientras los clientes salían con el atuendo que planeaban lucir durante la Nochebuena. Aquellos que aún contaban con un remanente del aguinaldo aprovechaban la oportunidad para adquirir un conjunto adicional para Navidad, Año Nuevo e incluso el Día de Reyes.