Los Mochis, Sin.- Empresa de autotransporte se niega a cumplir su responsabilidad de pagar las pérdidas del equipaje a los pasajeros que resultaron víctimas colaterales de la violencia durante el secuestro e incendio del autobús número económico 377 de la ruta Los Mochis-Culiacán, ocurrido en la carretera México 15 durante el segundo “Jueves Negro”.
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La señora Guadalupe Vega Cruz, de 64 años, es una de las afectadas, por lo que su hija pide a través de Línea Directa a las autoridades correspondientes que intervengan porque al comprar un boleto de pasaje implica tener seguro del viajero; sin embargo, hasta el momento la compañía de autobuses autotransporte no ha respondido por los daños.
Señaló que en el caso de su mamá además de su ropa comprada con mucho esfuerzo en diciembre, también llevaba regalos de Navidad a sus nietos en San José del Cabo, a donde ella viajaría, por lo que se dirigía al aeropuerto de Culiacán para abordar el vuelo hacia ese destino turístico; además de machaca y otros alimentos sinaloenses muy apreciados por la familia que vive fuera del estado, pero al parecer la empresa de autotransporte le apuesta a que el caso quede en el olvido.
“Que sea responsable la empresa, que les solucione de manera económica la pérdida de las cosas personales, pero la empresa le dijo a mi mamá que antier fue, por lo de su maleta, y le dijeron que la aseguranza no se quiere hacer responsable y por consecuencia la empresa no puede responder tampoco a ellos”, señaló.
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La hija de la adulta mayor lamentó que además de la terrible experiencia traumática que vivieron los pasajeros del autobús al ser amenazados por personas armadas que los bajaron a la fuerza obligándolos a caminar durante horas por la carretera hasta llegar a la población de Caimanero donde pernoctaron en espera de ser rescatados, todavía tengan que sufrir este viacrucis para tratar de recuperar el valor de sus pertenencias perdidas por causa de la violencia.
Este jueves se cumplieron cuatro semanas de ocurrido el segundo “Jueves Negro” el pasado 5 de enero, durante el operativo federal de recaptura de Ovidio Guzmán, operativo en el que grupos armados despojaron e incendiaron cientos de vehículos para bloquear carreteras estatales y la internacional como represalia para tratar de impedir la detención del presunto capo.