El masticar chicle también suele ser adictivo. Pero, ¿sabes cuántas bacterias hay el chicle que masticas?. La goma de mascar no es nueva, al contrario, ha sido usada por el ser humano desde hace miles de años. Muchos pero muchos años atrás, se fabricaban con resinas de alquitrán y se utilizaban para limpiar los dientes.
Como dato histórico, los primeros chicles fueron incluidos de manera comercial en el siglo XIX. Y actualmente, se han convertido en un producto de consumo masivo.
Se sabe que uno de los componentes mas utilizados en la fabricación del chicle es el Xylitol, es decir, se trata de un substituto del azúcar. Y que es considerado como un edulcorante terapéutico, derivado de su contenido de diversas propiedades que ayudan a mantener la salud oral.
Un grupo de investigadores se dieron a la tarea de analizar algunos chicles que se recogieron del suelo. Entre los resultados, señalaron que contenían un bacterias como Sphingomonas, Kocuria, Deinococcus, Blastococcus, entre otros.
En tanto, las muestras estudiadas sin haberse tirado al suelo, contenían algo similar a la microbiota oral típica de la boca con bacterias como Rothia, Haemophilus, Corynebacterium, Veillonella, Actinomyces.
Por otro lado, un estudio del Centro Médico Universitario de la Universidad de Groningen, en Países Bajos, y publicado en la revista científica PLoS One, refiere que hasta un 10 por ciento de las bacterias que habitan en la boca se quedan pegadas en un trozo normal de goma de mascar.
“Nuestros hallazgos tienen implicaciones para una amplia gama de disciplinas, incluida la medicina forense, el control de enfermedades contagiosas o la biorremediación de residuos de goma de mascar desperdiciados”, investigadores