Navolato, Sin.- Un enjambre de abejas provocó un accidente de carretera el mediodía de este domingo provocando la muerte de un joven estudiante y tres personas lesionadas, entre ellas un bebé de año y medio de edad, en una carretera del municipio de Navolato, muy cerca de la Bahía de Altata.
Las autoridades informaron que el fallecido se llamaba Jesús David, de 32 años de edad, con domicilio en el fraccionamiento Rincón del Valle de la ciudad de Culiacán, mientras que los heridos son una familia residente del campo pesquero de Dautillos, dos de ellos identificados con María de los Ángeles, de 28 años, y Ángel, de un año y medio de edad.
El accidente se registró a la 1:00 de la tarde sobre la citada carretera, entre las comunidades de La Bandera y el ejido Nuevo Cosalá, por donde ambas unidades circulaban con dirección al oriente cuando sucedió el percance.
Según los datos, un vehículo Jeep Wrangler de color rojo tripulado por el ahora fallecido transitaba por la citada carretera, cuando de pronto se topó con un enjambre de abejas que pasaba por el lugar, provocando que los insectos hicieran perder el control al conductor y posteriormente chocó por alcance contra un automóvil Volkswagen Jetta de color verde en el que viajaba la familia.
Corporaciones de seguridad y auxilio atendieron el accidente. (Ernesto Martínez)
Tras el choque el Volkswagen Jetta se volcó hacia un pequeño barranco ubicado a un costado de la cinta asfáltica donde quedó con las llantas hacia arriba, mientras que el Jeep Wrangler se volcó aparatosamente sobre el pavimento dando varias vueltas hasta quedar a punto de caer sobre un dren que atraviesa dicha carretera donde el joven dejó de existir casi de manera instantánea.
Al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal, bomberos, Cruz Roja y Protección Civil de Navolato, quienes auxiliaron a los heridos y los trasladaron al hospital del Seguro Social de dicho municipio, donde horas más tarde fueron dados de alta debido a que las lesiones que presentaron no eran de gravedad.
Elementos de servicios periciales y del servicio médico forense tuvieron que utilizar equipo especial para evitar las picaduras de las abejas, ya que en el sitio los animales permanecieron excitados por más de dos horas, tiempo en el que algunos socorristas y autoridades resultaron con picaduras leves.