Culiacán, Sin.- Fue el chaleco antibalas y su pericia para usar su arma de cargo la que le valió para salvar su vida al Comandante Níquel, activo de la Policía Estatal Preventiva ante una verdadera emboscada de un grupo armado.
Según el reporte extraoficial, le dispararon en más de 30 ocasiones con armas de grueso calibre R15 y AK47, además de una nueve milímetros.
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En las primeras versiones, se dijo que también hubo disparos detonados desde una escopeta y un Barret Calibre 50, aunque ello no se ha confirmado por la Fiscalía General del Estado.
Línea Directa obtuvo información de mandos superiores de la PEP que confirman que el “Comandante Níquel” iba solo en su auto luego de salir de su turno de trabajo, cuando a las 20:25 horas un grupo armado lo atacó de forma directa.
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El comandante llevaba puesto su chaleco antibalas, donde impactaron varios de los disparos de calibre .223, 7.62 y de nueve milímetros.
En su cuerpo lograron impactarle en una pierna y hombro, heridas que no ponen en riesgo su vida. Por las dudas, sus compañeros han mantenido un cerco de seguridad en el hospital donde fue atendido desde la noche de este lunes.
El “Comandante Níquel” tomó un curso de adiestramiento en Michoacán apenas en septiembre y octubre pasado, “una capacitación precisamente para emboscadas, que si no quién sabe si la hubiera librado”, comentó uno de sus compañeros de corporación.
