Al momento

?Viven ya el 2021

Los alcaldes y diputados locales de Sinaloa acaban de cumplir seis y siete meses, respectivamente, en el desempeño de su cargo. A poco menos de dos...

Línea Directa | La información al momento
La información al momento | Línea Directa

Los alcaldes y diputados locales de Sinaloa acaban de cumplir seis y siete meses, respectivamente, en el desempeño de su cargo. A poco menos de dos años de la elección de 2021, la pregunta que los actores políticos deben hacerse es si para entonces los electores votarán igual que como lo hicieron en 2018.

Muchos así lo quisieran, pero las condiciones serán muy diferentes, pues cambian con el ejercicio del poder y se suman otros factores como las desatadas ambiciones que ya muestran muchos de los aspirantes a saltar, mantenerse o cambiar a un nuevo cargo.

Ya hay un evidente desgaste propio de las decisiones que se toman desde el poder, acentuado todo por el hecho de que no pocos de los que ganaron el año pasado no lo hicieron por méritos propios sino montados en la ola que generó el hoy presidente López Obrador, quien no estará de nuevo en las boletas en esta elección intermedia y no tienen ni idea de lo que tienen que hacer en la responsabilidad asumida.

La mayoría no tiene la capacidad ni la vocación para desempeñarse en el servicio público, y ese también en un factor que va minando al partido por el que arribaron. Además de la incapacidad manifiesta está la clara arrogancia que muestran varios alcaldes, regidores, legisladores y otros servidores públicos que lo son gracias ahora gracias a ese triunfo. Ahí están los escándalos en varias alcaldías y en el Congreso del Estado.

El perder de vista la real causa de sus respetivos triunfos ha generado que desde ahora se desate, principalmente en el partido que arrasó la elección, Morena, una feroz lucha interna por la disputa de las próximas candidaturas. Eso es entendible porque eso siempre es más notorio en el partido mayoritario.

En Sinaloa, en la elección de julio del año pasado Morena ganó la presidencia de la República, las dos posiciones en el Senado, los 7 distritos electorales federales, 19 diputaciones locales y 7 presidencias municipales, incluyendo las más grandes: Culiacán, Mazatlán, Ahome y Guasave.

Un tremendo salto, partiendo de que en las elecciones locales de 2016 Morena había alcanzado solo el 5 porciento de la votación total emitida, hazaña que se explica por el hartazgo de la gente por muchas acciones de gobierno y el fuerte rechazo a la clase política tradicional, además, claro, del fenómeno Andrés Manuel López Obrador.

Pero ni las condiciones políticas ni las relaciones entre los aliados del año pasado son ahora las mismas y elementalmente manejables. Hay una evidente confrontación entre las fuerzas internas del proyecto ganador de 2018, generada por un apresurado futurismo y la disputa de todos los espacios de poder, que pone riesgo el mantener los espacios ganados en las urnas el pasado 1 de julio.

Ese aceleramiento es incentivado por la errónea creencia de unos de que ganaron por méritos propios y que por ello pueden aspirar a más, y de otros porque piensan que si quienes ayer triunfaron pudieron hacerlo pese a los limitantes, bien pueden hacerlo ellos porque se creen superiores.

Y ahí será donde se darán contra la pared en 2021, si no tienen la capacidad ahora para empezar a componer las cosas. Y para eso tienen que empezar por preguntarse si los votantes sinaloenses votarían hoy igual que como lo hicieron el año pasado, pese a lo que ya han visto que hacen a quienes hicieron ganar.

Fuente: Internet

Al momento

Suscríbete a nuestro boletín

Para tener la información al momento, suscríbete a nuestro boletín en el tendrás las últimas noticias de Sinaloa, México y el mundo.