Los vientos de semana santa traen consigo la posibilidad de que boxeo continúe en los Juegos Olímpicos, disciplina que entró en pauta e incertidumbre desde el 2023 cuando el Comité Olímpico Internacional la sentenció a desaparecer, porque, como todos sabemos, no comulgaba con las ideas, decisiones y manejos de la International Boxing Association (AIB).
Esta se convertirá en una extraordinaria noticia para los países que dominan esta disciplina a nivel mundial, como también para aquellos deportistas que viven el sueño olímpico.
Dicen que posiblemente en esta misma semana se haga oficial no el regreso, sino borrar la pausa en la que encasillaron el boxeo cuando el COI decidió suspender a la Asociación por irregularidades al interior del organismo.
La creación de la Federación Mundial de Boxeo (WBF), a la que se sumaron alrededor de 80 federaciones del planeta, resultó fundamental para que el Comité Olímpico Internacional escuchara a los deportistas a través de los directivos, y ofrecerles la oportunidad de contar este deporte en Los Angeles 2028, según declaraciones de Thomas Bach, presidente del COI.
El boxeo no podría quedar fuera de unos Juegos Olímpicos de Los Angeles porque sería como decir que el futbol fuera marginado en Brasil como sede, o el béisbol en Cuba. Los norteamericanos han sido, y continúan siendo, potencia en el pugilismo. Muchos de sus medallistas de Oro han triunfado en el boxeo de paga. Citar nombres ocuparía todo este espacio.
Desafortunadamente no puedo decir lo mismo de México, cuyas preseas llegan a cuenta gotas, pero al menos alienta el sueño de algunos jóvenes que todavía se ilusionan con acudir a esa fiesta cuatrienal, y que estaban a la espera para tomar de decisión de esperar o brincar al profesionalismo.
Uno de ellos era el mazatleco Marco Alonso Verde, ganador de la presea de plata el año pasado en Paris, Francia. El “Green” mantuvo viva la posibilidad de buscar el oro en los siguientes Juegos, pero terminó dando un paso a un costado e inclinarse por el boxeo rentado cuando se dio a conocer que el boxeo no iba a Los Angeles.
Verde estará debutando en mayo en Arabia Saudita, formando parte de una gran cartelera que encabeza Saúl Alvarez con quien él y su entrenador Radamés Hernández han formalizado una alianza de promoción y mutua ayuda para llevar al sinaloense a la cumbre.
En el horizonte del boxeo sinaloense desafortunadamente no se atisba la posibilidad de que un paisano esté en la ruta hacia los Juegos de L.A.. Lo de Verde fue un proceso a largo plazo que comenzó desde sus 12 años de edad gracias a su dedicación, al esfuerzo de Radamés Hernández y a que en su momento existía el Centro de Alto Rendimiento de Boxeo en Los Mochis, ese por capricho de la administración estatal anterior a la actual, que por su falta de visión y ahorrarse unos miles de pesos, optaron por desaparecerlo.