Culiacán del caos vial irremediable, Sinaloa, 19 de junio 2023. La ley para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas del Estado de Sinaloa, se aprobó el 24 de mayo de 2022 y fue publicada en el Periódico Oficial cinco días después.
Por derivación se creó un “Instituto para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas” y se nombró presidenta del mismo a Jhenny Judith Bernal Arellano, que no es periodista (cuenta con curriculum en materia de derechos humanos) pero recibió el “voto de confianza” de una asociación de comunicadores.
En su primer año, en el presupuesto de egresos del estado, al Instituto se le asignaron 12 millones de pesos y, para este año, su titular solicitó 24 millones, 500 mil pesos, de los cuales el 70 por ciento iría a “gastos operativos”.
Se pidieron 25 plazas para operar el Instituto, con sueldos de 20 mil a 60 mil pesos mensuales, además de compensaciones, viáticos, vacaciones (dos veces al año) y aguinaldo de 60 días.
En su momento, Griselda Triana, consejera del organismo emergente, se opuso a la propuesta de la titular por considerar que privilegiaba “altos salarios y una nómina inflada; además de proponer un instituto burocratizado con coordinadores, subcoordinadores y unidades”.
Abundó Triana: “otros mecanismos de protección a periodistas de otros estados del país operan con mucho menos presupuesto que el que se propone, como el de la ciudad de México, que opera con 12 millones de pesos y el de Veracruz con 9 mdp”.
QUEDÓ EN DOCE MILLONES
Finalmente, el presupuesto para este año quedó en poco más de 12 millones, de los cuales la mayor parte se va a pago de nómina y servicios: 578 mil 131.9 pesos mensuales, mientras que en ayudas sociales a defensores y periodistas se destinan 110 mil 370 pesos.
La directora, Jhenny Bernal, gana 63 mil 112 pesos mensuales; la secretaria técnica, Flor Leticia Castaños, 17 mil 687 pesos a la quincena; el coordinador de medidas, Juan Luis Quiñones Moreno, 20 mil 235 pesos, el titular de Transparencia, 12 mil 669 pesos.
La coordinadora Jurídica, María de los Ángeles Valdez Inzunza, 20 mil 235 pesos quincenales, el coordinador administrativo, Cristian Alberto Acosta Padilla, 20 mil 235 pesos.
El resto del personal contratado, otras siete personas, tiene sueldos quincenales que van de los 12 mil hasta los 15 mil pesos.
Para el pago de todos esos funcionarios se destinan 421 mil 723 pesos al mes y hay otro personal, “de carácter transitorio”, que recibe en conjunto 50 mil pesos.
Esta información es parte de la excelente nota de Martín Durán, con información de Josemiguel Souza y Manuela Bustamante, en “El Sol de Sinaloa” (lunes 5 de junio 2023).
LO QUE SE INFORMA
En el primer trimestre de este año se pagaron casi un millón y medio de pesos en nómina y servicios; poco más de 331 mil pesos en ayudas; casi 380 mil en muebles de oficina y equipos de cómputo y algo más de 123 mil pesos en materiales y suministros.
En el sitio web del Instituto se informa que, entre agosto de 2022 y mayo de 2023, se han dictado medidas a favor de periodistas y defensores de derechos humanos del estado de Sinaloa: medidas preventivas, 75; medidas de atención, 32; medidas de urgente protección, 31 y medidas de protección, 4. En total, 142 medidas.
Parece conveniente tal información, pero es evidente que hace falta mucho más.
SALIR AL PASO DE LA SIMULACIÓN
Desde luego, toda intención en el campo de la defensa de los derechos humanos y la libertad de expresión es recuperable.
El Instituto ahí está, y la cuestión es: ¿Cuáles son sus resultados evaluables, las líneas de acción que realmente repercuten en mayor seguridad, libertad de expresión y garantías?
Solo quienes actúan como recién llegados, o por interés particular, marginan que, antes y ahora, la problemática del caso exige respuestas mucho más puntuales.
Por lo demás, la atención, oportunidad y eficiencia en el cumplimiento de las funciones declaradas ha sido seriamente cuestionada al Instituto. Defensores de derechos y no pocos periodistas le han calificado como un “elefante blanco”.
Guste o no, la experiencia indica que de comisiones, institutos, centros, comités, convenios y demás, está plagado el camino de la simulación. Ya se verá si se trata de uno más ¿O se está viendo?
EN EL TINTERO
La abierta promoción de basura “musical”, “tendencias” de las tales redes, internalización irresponsable de expresiones que rayan en la tontería y promueven la incultura: “causa furor”, “arrasa”, “deja sin aliento”, “hace explotar”, “conquista”, “deslumbra”, “hipnotiza” y más ridiculeces, refiriéndose a los andares de “la farándula”, “celebrities” e “influencers”, es lo que caracteriza a la gran mayoría de los “medios” en la actualidad. No les da para más.
“Ratoncitos verdes”, les llamaba don Manuel Seyde, hace más de 50 años, a los futbolistas de la selección mexicana. Eso no tiene para cuando cambiar. ([email protected]).
