El secretario de Agricultura del gobierno de Sinaloa, Manuel Tarriba Urtuzuástegui, propuso pagarle con la misma moneda a Estados Unidos, y dijo que si los vecinos del norte empiezan a aplicar un arancel del 17.5% al tomate mexicano, habría que hacerles lo mismo pero con el maíz amarillo transgénico.
Don Manuel argumentó que este tipo de maíz que Estados Unidos exporta a nuestro país es de mala calidad y es una competencia desleal por su precio más barato que el grano blanco, además de que se importa cuando en México se está en plena cosecha. Incluso, aseguró que este planteamiento ya se manejó en diferentes mesas de diálogo con el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural del gobierno federal, Víctor Villalobos Arámbula.
Y quizá a uno que otro le parezca buena la idea de Tarriba, pero habría que recordarles aquella frase que reza: ojo por ojo y el mundo acabará ciego. En el tema de los aranceles al tomate, la solución no es la venganza y mucho menos sería deseable empezar una guerra comercial con Estados Unidos, que ahorita el horno no está para bollos. O quizá Don Manuel no desea que se tomen tan en serio sus declaraciones, que a fin de cuentas esta decisión recae no en él sino en las más altas esferas del gobierno de Andrés Manuel López Obrador…
Y para todos aquellos malpensados y desconfiados, el fiscal general del Estado, Juan José Ríos Estavillo, dejó por lo claro que el organismo a su cargo no actuó ni actuará bajo favoritismos o presiones políticas en el caso de la denuncia penal en contra del alcalde de Ahome, Manuel Guillermo Chapman.
Aunque la verdad, cómo no ser desconfiados, si la Fiscalía quedó bastante mal después de que el pasado martes una juez de control revocara la determinación del no ejercicio de la acción penal en el caso de las supuestas amenazas del alcalde contra la síndica procuradora, Angelina Valenzuela.
En otras palabras, en abril pasado, el Ministerio Público quiso enterrar el asunto argumentando falta de pruebas, pero desde el Poder Judicial le dieron reversa. Pero para nada se trató de favoritismos, subrayó Ríos Estavillo, quien aseguró que ahora que se reabra el caso sólo esperemos de la Fiscalía “imparcialidad” y el “pronto ejercicio” de su competencia. ¿A poco sí?
Y la nueva de Guasave es que “no hay conflicto de intereses pero sí contratamos servicios y pagamos dinero público a familiares de funcionarios”…
Decimos esto por el reciente caso dado a conocer de que la administración de Aurelia Leal decidió que era buena idea rentarle un inmueble a la suegra del director de Desarrollo Económico del municipio, Benjamín Ahumada López, para ubicar ahí las oficinas de Relaciones Exteriores, la Dirección de Salud, Vía Pública y, oh sorpresa, la Dirección de Desarrollo Económico, donde despacha el yerno de la dueña.
Eso, que en cualquier otro lado se llamaría conflicto de intereses, para Doña Aurelia no lo es, quien justificó que se necesita ese inmueble para que a la gente “le quede más cerca” esas oficinas. Y podríamos tragarnos el cuento de la alcaldesa, pero entonces uno se pregunta si no había en Guasave algún otro inmueble céntrico en renta… Así que en resumen: los ayuntamientos de esta Cuarta Transformación se han vuelto expertos en negar lo innegable.
En el puerto de Mazatlán, por cierto, no hay día en que haya tiro entre el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres y la síndica procuradora, Elsa Bojórquez Mascareño.
Y es que ayer el “Químico” retó a Doña Elsa a no quedarse “solo” con la denuncia ya interpuesta ante el Tribunal de Justicia Administrativa en contra de Carlos Felton, por el caso de un arrendamiento irregular de 77 vehículos, sino también buscar ejecutar acciones legales, incluso hasta penales, en contra de la administración anterior de Fernando Pucheta.
El alcalde mazatleco argumentó que su antecesor dejó muchísimas más irregularidades que han ido detectando poco a poco… aunque la verdad pareciera que estas últimas declaraciones, más que estar buscando el actuar de la justicia, tenían por objetivo llevarle la contra y seguir siendo una piedra en el zapato para la síndica procuradora, como una forma de decirle: “ni te emociones que no has hecho gran cosa”. Eso sí, el reto está hecho y veremos si la síndica, como dicen popularmente, “le entra”… ¿A poco no? Así se las gastan. O peor…Comentarios: [email protected]