Tal vez lo que está pasando en Francia en estos días pudiese explicarnos lo que más adelante podría pasar en nuestro país.
Los chalecos amarillos de repente salieron de la nada, obreros, universitarios, campesinos, empleados de las zonas rurales para protestar por el costo de la vida, sobre todo el costo del diesel y el alza de impuestos, y es que en este siglo donde los hidrocarburos todavía mueven al mundo, la bomba de combustible puede llegar a ser el eje que mueve al mundo y a sus ciudades.
No hay partidos políticos, ni movimientos políticos detrás de esta gente, estos ciudadanos de la zona rural pero bien informados de repente se pusieron los chalecos amarillos para que el Estado Francés los mire, para que no pasen desapercibidos y los tome en cuenta.
El Presidente Macron con una enorme legitimidad está enfrentando una de las protestas más fuertes en su país, Macron sale a cuadro con el gesto descuadrado, de repente al Estadista mundial, el niño bien de la Unión Europea unos campesinos lo desubicaron y le están metiendo turbulencia a su mandato.
Y es que el imperativo moral de los protestantes es el siguiente: “París no es Francia” dando a entender que las políticas del gobierno únicamente se dirigen hacia la ciudad de la luz y el resto no cuenta.
136 mil personas han participado en la marcha de los chalecos amarillos y la policía no se hizo esperar, estas protestas le han costado a París que el sector restaurantero cayera de 15% al 50% y el sector hotelero cayó entre el 15 al 25%.
En esta Cuarta Transformación, donde la fortaleza de su discurso político fue la reducción del costo de la gasolina, sus dirigentes han ido explicando como no podrán cumplir esa promesa y dejarán todo a las leyes de oferta y demanda, pero que ellos no la subirán.
¿Que pasará cuando la ley de oferta y demanda obligue a subir el precio de la gasolina?
¿Qué pasará cuando la 4T enfrente las primeras protestas reales?
Francia nos explica lo que podría pasar en nuestro país, que de la nada la gente salió a protestar y, así como salieron los franceses, podrían sustentar que el país no es la Ciudad de México ni el sureste, donde está la base política del Presidente.
Con la reducción al campo podría haber protestas, pero tienen que estar legitimadas como en Francia y no tomarse desde una posición de revanchismo político.
Después de estos días, viene la cuesta de enero y ya la gente empezará a sacar cuentas y pasará la resaca del Presupuesto, así empezaremos a ver como se va a configurar el primer año del gobierno de esta Cuarta Transformación.
¿Qué va a pasar cuando ciudadanos protesten en México? Ciudadanos que no son ni fifís, ni de derecha ¿Qué dirá el Presidente? ¿Reprimirá como Macron? No creo que lo haga, pero a la Defensa Nacional le subieron el presupuesto.
Por lo pronto la Francia sigue en protestas y Macron el Estadista, el legitimado, no le encuentra la cuadratura al círculo. Por lo pronto le explotó la bomba y tan legitimado y todo sacó a la policía a reprimir.
México no es Francia, pero el mundo se está explicando desde París.
Si no al tiempo…