Primero nos sorprendieron con Izquierda: 1923-2023 la terca travesía.
Álvaro Delgado y Alejandro Páez Varela nos dicen que la derecha mexicana es el proyecto más sólido, más constante y más hábil de tres siglos (XIX, XX y XXI) de México independiente.
Ha sido gobierno, ha dominado los poderes formales y los de facto; ha operado las políticas públicas y las finanzas de la nación; se ha regulado así misma y ha disputado el control del poder político entre sus fracciones durante tanto tiempo que es difícil definir su frontera. Se ha apropiado del pensamiento crítico, de la academia; ha sido revolución, movimiento, contrarrevolución, Legislativo, Ejecutivo y Poder Judicial. Ha usado el centro, y hasta la izquierda; ha corrompido, comprado y convencido; ha cometido fraudes electorales. Ha manejado sus propios recursos y los recursos de las mayorías como propios. Ha recibido ayuda desde el extranjero y se ha atrincherado en el nacionalismo. Ha sido radical y moderada. Se ha beneficiado de los recursos nacionales y los ha repartido a discreción. Y se ha vuelto maestra del disfraz.
La derecha es un proyecto en constante evolución, es político, cultural, económico, de gobierno, educativo y todo lo anterior y mantiene su libertad para no perder movilidad y adaptarse a los tiempos.
Habita en el conservadurismo, pero tiene un campo natural más amplio: el centro, por ejemplo. Es un proyecto católico y laico, protestante o netamente económico. Está por encima de las leyes, actúa sin limitantes jurídicas; ejerce la fuerza y la negocia, según sea el caso. Y siempre lo hace a nombre de valores democráticos.
La derecha en México, con todos los matices, intensidades y hasta divergencias, es una sola y muy cohesionada: no ha renunciado al viejo proyecto conservador de instaurar un gobierno católico ni ha dejado de combatir el laicismo, la educación sexual y la secularización de la sociedad, pero ha priorizado los grandes intereses económicos, públicos y privados, nacionales y trasnacionales, con una tendencia cada vez más acentuada a la corrupción.
En el periodo definido como neoliberal, que va de Miguel de la Madrid a Enrique Peña Nieto, la acción de la derecha como gobierno, con su predominio en todas las instituciones del Estado, ha sido el desmantelamiento del sector público en beneficio del privado, en una estrategia que ha sido transversal a los partidos políticos históricos que terminarían por unificarse política y electoralmente en la segunda década del siglo XXI.
Fue en el nuevo siglo que la derecha en el poder y luego en la oposición se exhibió déspota, racista, rabiosa, vil, intolerante, tramposa, mentirosa, represiva y fraudulenta, pero a todo lo superó el ansia por el poder.
Derecha. Poder, corrupción y engaño es el libro más reciente que nos entrega Álvaro Delgado Gómez y Alejandro Páez Varela. Continúa la línea de investigación que en su tiempo inició Gastón García Cantú, al estudiar El pensamiento de la reacción mexicana.
Empieza a analizar desde el siglo XIX para rescatar las raíces del pensamiento conservador, camina sobre la fundación del neoliberalismo en el siglo XX y sobre los últimos presidentes de derechas en México: Miguel de la Madrid, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Exhibe la actitud entreguista de la prensa, su corrupción, su rendición entre los poderes económico y político, y visibiliza la mano de Estados Unidos sobre los gobiernos para jalarlos, cada vez más hacia su derechización.
Si ya nos habían sorprendido con el libro Izquierda: 1923-2023: La terca travesía, ahora nos vuelven a sorprender con Derecha: Poder, corrupción y engaño. Recomendable su lectura.