Culiacán del caos vial ¿irremediable? Sinaloa, 18 de septiembre 2023. El 13 de febrero del año en curso se publicó en el Diario Oficial de la Federación un decreto, signado por AMLO, ordenando revocar y no dar más autorizaciones para el uso de maíz genéticamente modificado (transgénico) para alimentación humana (en la elaboración de masa y tortilla).
El argumento mexicano es que el maíz biotecnológico perjudica a las variedades autóctonas y puede tener efectos adversos para la salud, como lo han evidenciado estudios científicos que son descalificados en Estados Unidos y Canadá, cuyos gobiernos quieren que México dé marcha atrás.
Estudios de la Fundación UNAM revelan que el maíz transgénico es modificado genéticamente para que tolere el herbicida glifosato, que la OMS ha clasificado como probable cancerígeno.
LO QUE ESTÁ DETRÁS
Las principales empresas que producen y comercializan la semilla del transgénico son Syngenta, Pioneer y Monsanto, las tres de capital transnacional, que concentran casi la mitad del mercado mundial y tienen ventas por decenas de miles de millones de dólares.
Al reclamo del gobierno de Biden, se ha sumado el de Canadá, que por lo general sigue las consignas de su socio y también tiene intereses empresariales en el asunto. Ambos apelan al Capítulo de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias del TMEC, amenazando con un “panel de controversias”.
Estados Unidos ocupa el primer lugar como productor y exportador de maíz a nivel mundial, produciendo en promedio más de 300 millones de toneladas métricas anuales, y Canadá también participa del negocio.
Es claro, entonces, porque pretenden que México dé marcha atrás y permita que el transgénico siga llegando a nuestro país para consumo humano.
LA POSICIÓN DE MÉXICO
Al respecto, Víctor Suárez, subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), hace unas semanas denunció la intención del gobierno de Estados Unidos (ahora sumando Canadá) de intervenir para que México no prohíba el uso de maíz transgénico en la elaboración de tortillas.
Se trata, en efecto, de “un caso extremo de injerencia de poderes externos a decisiones soberanas”, dijo y agregó: no se permitirá y “con este gobierno (el de AMLO) por primera vez en décadas, se ejerce el principio de soberanía alimentaria”, rompiendo con “el colonialismo sobre los sistemas alimentarios”.
Como sea, y a pesar de que evidentemente no les asiste la razón, Estados Unidos y Canadá se encaminan al panel de controversia, mientras sus socios en México (un sector de la privada iniciativa en el llamado “frente amplio” prianredista encabezado por Claudio X) de hecho les apoyan.
Ese frente, dígase lo que se diga, está contra la soberanía nacional, sin asomo de duda.
CON ESOS APOYADORES
Entre las corporaciones que en México apoyan a las transnacionales del transgénico (por intereses particulares) están el Consejo Nacional Agropecuario (CNA), el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos (Umffaac).
En días recientes, el protagónico embajador estadunidense en México, Ken Salazar, incluyó al sector energético en las “revisiones” del TMEC que pretenden.
En ese caso, ya cuentan con la promesa del “frente amplio” de darles el control de Pemex y la CFE a las transnacionales.
Pero eso, por supuesto, no sucederá ni de milagro.
EN EL TINTERO
-No paran las estupideces de políticos republicanos de Estados Unidos al referirse, siempre de manera insultante y despectiva, a México. Y subirán de tono a medida que se acercan sus elecciones.
-Más allá de la caricatura, la ultraderecha mexicana exhibe la credibilidad de las “buenas conciencias”, esas que están a favor de quemar libros y linchar a los seguidores de AMLO.
-Por lo pronto, libros ya han quemado.
-Imparables los fraudes (o intentos de) a través de la Internet, de call centers, sitios que suplantan a paqueterías, telefónicas, bancos y demás. ¿Nada se puede hacer al respecto? ¿Impotencia total de las autoridades “competentes”?
-Por cierto, luego de la denuncia de un cargo fraudulento (del que no dieron notificación) los bancos tardan más de un mes en regresar el dinero al cuentahabiente (si es que no salen con otra cosa).
-El caos vial en Culiacán (en realidad en todas las ciudades del estado) ¿No tiene remedio? No, mientras las autoridades sigan en la total negligencia, incapacidad e importamadrismo.
-¿Y el tal Instituto Municipal de Planeación o como se llame? ¿Qué hace aparte de bien cobrar?
-El Apunte, también en: Voces-del-Periodista (vocesdelperiodista.mx) la revista del Club de Periodistas de México, cuya delegación integramos en Sinaloa. ([email protected]).
