Este jueves inicia la Serie del Caribe en Miami, donde en par de años consecutivos se realizó con más pena que gloria por dos motivos: poco interés del aficionado por ser una plaza que tiene el mejor béisbol del mundo en verano y, por otra parte, debido a las dimensiones tan ilógicas que se establecieron en un campo de futbol americano ¿Lo recuerdan?
La otra novedad es que habrá siete equipos, entre ellos una selección de Curazao que no cuenta con pelota profesional y la ausencia de Cuba y Colombia que muy recientemente le dieron protagonismo al evento que parece encaminado a una especie de Copa Mundial Latinoamericana a corto plazo, precisamente por el crecimiento de conjuntos.
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El equipo mexicano representado por los Naranjeros de Hermosillo –con 15 jugadores que no vieron acción con ellos en rol regular- llegarán en calidad de favoritos, no por porque se presente con un trabuco, sino porque desde hace algunos años Dominicana, Puerto Rico y Venezuela se olvidaron de integrar aquellos auténticos “dream team” de los 80´s y 90´s, a los que eran una auténtica delicia poder ver en acción.
Las figuras de aquellos países se fueron ausentando al grado de que se cuentan con los dedos de una mano –y a veces sobran- el número de bigleaguers que cada uno de ellos suben al barco de la competencia.
Muchos jugadores grandes ligas prefieren descansar tras su participación en la campaña de Estados Unidos, olvidándose de aquel genuino amor por la camiseta. Eso ya no existe, ¡vaya!, ni en México. Tenemos muchos ejemplos de ello, como el de Joey Menéses, quien tras ser eliminado Culiacán les cerró las puertas a los dos finalistas (Mazatlán y Hermosillo) al anticiparse a anunciar que no quería participar como refuerzo, mucho menos asistir al clásico latinoamericano.
Es entendible que ellos prefieran descansar. Y tal vez no sea ese el motivo, sino el hecho de evitar una lesión que ponga en riesgo su carrera en la unión americana.
A propósito de ligamayoristas, Isaac Paredes se bajó del barco a menos de 48 horas de arrancar el certamen. Al sonorense le prohibieron competir en Miami, el equipo de la Florida al cual pertenece (Tampa Bay). Isaac fue pieza clave y fundamental para que los Naranjeros rompieran diez años de sequía y se alzaran con su corona número 17.
Paredes estaba en la línea de los jugadores a seguir –por su etiqueta de ligamayorista- en la Serie, pero eso, además de ser una estrella menos, le quita un gran bat al conjunto azteca. Aún así, Hermosillo asiste con un equipo que tiene mucha capacidad ofensiva y profundidad en su pitcheo abridor. Ni qué decir del relevo corto, con esa tercia que integran Jake Sánchez, el colombiano Elkin Alcalá (líder en salvados en la campaña) y Luis Márquez.