?México, DF.- Habitantes de diferentes municipios del Estado de México rechazan la
restricción para adquirir antibióticos sin presentación de una receta
médica, pues consideraron que afectará la economía de los ciudadanos.
Durante recorridos por diferentes farmacias, a unos días de que entre en
vigor la medida el próximo 25 de agosto, vecinos de Naucalpan, Atizapán
y Cuautitlán Izcalli advirtieron que la medida obligará a consultar
médicos de manera forzosa y destinar recursos extras para atender algún
padecimiento.
`Hoy en día no es necesario ir con el doctor cuando tienes una gripe o
un dolor de garganta, porque son enfermedades que la gente ya ha
padecido y que sabemos qué medicamento comprar`, señaló Alejandra
Medina, vecina de Lomas de Atizapán.
`Ahora vamos a tener que ir a fuerza a ver a un doctor, gastar por lo
menos 100 pesos en la consulta y además pagar los medicamentos; eso a la
larga va a obligar a la gente a buscar remedios caseros para
atenderse`, indicó.
En mayo, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos
Sanitarios (Cofepris) dio a conocer que a partir del 25 de agosto se
dejarán de vender dos mil antibióticos a quien no presente receta
médica.
Rufino Estrada, vecino de Jardines de San Mateo, en Naucalpan, apuntó
que incluso quedará limitado a consultar vía telefónica a un familiar o
un amigo doctor cuando algún integrante de la familia se encuentra
enfermo.
`No entiendo para qué van a aplicar esta restricción si a fin de cuentas
van a causar muchos problemas para los ciudadanos; la gente no tiene
tiempo de ir al doctor o a la clínica para que le den una receta y ahora
ni siquiera una consulta telefónica se va a permitir`, comentó.
En algunas farmacias del Valle de México hasta el momento no se ha
notificado respecto a la restricción para vender antibióticos sin
recetas médicas a partir del próximo 25 de agosto, por lo que los
empleados tampoco tienen información para orientar a los clientes.
Azucena Espinosa, vecina de Valle Dorado, en Tlalnepantla, refirió que
al acudir a comprar medicamentos preguntó a uno de los empleados sobre
la restricción, sin lograr mayor información al respecto.
`Me comentaron que sólo sabían que entraba la restricción el 25 de
agosto, pero no me supieron decir si habrá que presentar una copia de la
receta o si se van a quedar con la original. No tienen ni idea de cómo
se va a aplicar este asunto y quienes resultamos perjudicados somos los
ciudadanos`, condenó.
