Estado de México. El pasado 11 de noviembre policías de la Dirección de Seguridad Pública de Chimalhuacán, Estado de México, dispararon en contra de un joven, de apenas 22 años de edad, quien a causa de los múltiples disparos perdió la vida.
Así lo acusan familiares, quienes ya se despidieron de Ángel Ramón Tavera Colín, la víctima de los uniformados. Según se explica, el ahora occiso recibió al menos cinco impactos de bala de parte de un elemento de la corporación policíaca.
“Fueron cinco impactos de bala, no, creo que no fue justo la manera en que lo trataron, ya que no estaba ni armado, no estaba armado con un arma de fuego, argumentan las autoridades que tenía un arma punzo cortante y con esa hirió a su compañero, pero le proporcionaron cinco disparos en total tres en el torso, uno en la rodilla y uno en el talón”, fue la declaración del hermano de Ángel, quien se identificó como Alejandro Tavera.
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En contra parte, según detallan, las autoridades refieren que el reporte de auxilio fue porque presuntamente el joven agredía a personas. Entonces, argumentan que al querer revisarlo, supuestamente atacó con un arma blanca a dos oficiales.
“Ellos hicieron su legítima defensa y actuaron dentro de los protocolos de actuación cumpliendo dos cuestiones que están dentro de su servicio atender una llamada de auxilio y finalmente porque ellos ya habían sido atacados antes”, comentó por su parte el director de Seguridad Ciudadana y Tránsito, Salvador Hernández.
Hoy, la familia de Ángel pide que se haga justicia; Alejandro Tavera narró cómo fue que encontró a su hermano tirado, luego de que escucharon algunas detonaciones en calles cercanas a su casa.
