Guasave, Sin.- En un alarmante caso de extorsión telefónica, una víctima logró grabar la llamada en la que un presunto miembro del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) le amenazaba con asesinar a su hijo si no cumplía con sus exigencias. La grabación, revela la manera en la que los delincuentes manipulan y atemorizan a sus víctimas.
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“Es un poco delicado, ¿sí? Yo soy el comandante Cervantes, viejo”, inicia la voz del extorsionador, quien afirma pertenecer a la peligrosa organización criminal. Durante la conversación, detalla que su grupo habría capturado al hijo de la víctima bajo la acusación de haberlos visto descargar mercancía ilegal.
“Mis muchachos lo tuvieron que levantar porque él estaba mirando cuando estaban bajando la mercancía de mis camionetas, ¿sí?. Para poder bajártelo lo único que te voy a pedir es que no quiero a terceras personas porque no te lo quiero matar”, asegura el delincuente, reforzando la intimidación con un tono amenazante. Además, exige discreción y advierte sobre consecuencias fatales si se involucran autoridades o terceras personas.
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La táctica utilizada en este caso es una modalidad de secuestro virtual, donde los criminales no tienen realmente retenido a ningún familiar, pero logran manipular psicológicamente a las víctimas para obtener dinero. La grabación evidencia cómo los extorsionadores emplean un lenguaje violento y pretenden mantener el control emocional sobre la víctima.
Los criminales hacen constantes referencias a su supuesta pertenencia al CJNG, un recurso común para generar temor. Además, utilizan un lenguaje informal y persuasivo, dirigiéndose a la víctima con frases como “viejo” y afirmando que no buscan problemas con “gente tranquila y de trabajo”.
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El extorsionado exige pruebas visuales, solicitando un video o fotografía del hijo, como una manera de prolongar la manipulación y generar mayor angustia.
Las autoridades recomiendan mantener la calma en situaciones similares y seguir estos pasos:
1.No ceder ante amenazas: Mantener la calma y cortar la comunicación.
2.Verificar la situación: Intentar contactar de inmediato al supuesto familiar secuestrado.
3.Denunciar: Informar a las autoridades llamando al 911 o a la línea directa de atención a víctimas de extorsión.
4.Evitar proporcionar información personal: No revelar nombres, direcciones o datos bancarios.
En México, la extorsión telefónica continúa siendo uno de los delitos más recurrentes, con miles de casos reportados cada año. El uso de tecnologías como aplicaciones de mensajería y la proliferación de información personal en redes sociales facilitan la identificación y manipulación de las víctimas.
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Las autoridades instan a la ciudadanía a denunciar cualquier intento de extorsión a mantenerse informada sobre las medidas de prevención. Además, se recomienda participar en campañas de concientización y conocer los protocolos de respuesta ante este tipo de amenazas.
Este caso sirve como un recordatorio de la importancia de la educación digital y de la colaboración ciudadana para combatir la delincuencia. La rápida reacción de la víctima al registrar la llamada permitió visibilizar este tipo de delitos y advertir a otras posibles víctimas.
Para más información y asesoría, los afectados pueden acudir a la Fiscalía General de la República (FGR) o a las líneas de ayuda especializadas.
