México.- Durante su gira de despedida por Veracruz el día domingo, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue recibido por manifestantes, quienes le lanzaron una botella de agua luego de que se bajó su camioneta al llegar a un evento oficial. Al respecto, el mandatario minimizó el hecho y dijo que no habría represión contra quien lo hizo.
El incidente ocurrió el domingo a las afueras del Centro Cultural “Leyes de Reforma”, en el puerto de Veracruz, donde el presidente se disponía a ingresar para un evento oficial. Pero este lunes, durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, el mandatario dijo que sus habilidades de beisbolista le permitieron ver la botella, “la pude haber agarrado”.
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“Ayer me tiraron una botella de agua pero no pasa nada, yo empecé jugando beisbol, era filder, imagínense, hasta la pude haber agarrado, pero no pasó a mayores, entiendo que están enojados, por eso mismo ellos quisieran que no cambiara nada, el conservadurismo viene de conservar el status quo, ahí se les va a ir pasando el enojo”, dijo este lunes.
López Obrador dijo que se trata de manifestantes que no están de acuerdo con la Cuarta Transformación y quienes buscan que su gobierno falle o “quisieran decir o gritar” que son iguales a los gobiernos anteriores.
“Una cosa que les molesta mucho es que no haya corrupción, que les pueda yo sacar el pañuelito blanco, cuando ellos se dedicaban a saquear, el periodo neoliberal es el de más saqueo de la historia de México, ni siquiera se compara con los 3 siglos del periodo colonial”, consideró.
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Además, López Obrador dijo que no habría represalias contra los manifestantes ni para quien lanzó la botella de agua en su contra que casi lo impacta, al sostener que, a diferencias de otros gobiernos, en el suyo no se reprimirá a nadie.
“Otra cosa que les molesta es que no hay represión, por ejemplo, al que tiró la botella ayer puede estar tranquilo, no pasa nada, no pasa a mayores, yo también pido que actuemos con mucho respeto, que los que están participando en la transformación del país, que actuemos con respeto con tolerancia”, exhortó.
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El incidente se registró durante su gira de despedida por Veracruz, donde lo recibieron con gritos de “¡dictador, dictador!”, por parte de un grupo de presuntos trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF).
Justo cuando el presidente se bajó de su camioneta para llegar al lugar, de entre la multitud fue lanzada una botella con agua que no logró golpearlo. De inmediato, los elementos de seguridad reaccionaron logrando proteger al mandatario federal y escoltarlo rápidamente hacia el interior del edificio.
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