?Ciudad de México.- El clero en México no tiene derecho a expresarse libremente ni en cuestiones
políticas ni en temas que le corresponden desde el ámbito de la creencia
personal, considera el padre José de Jesús Aguilar, subdirector de radio y TV de
la Arquidiócesis de México.
“En cualquier parte del Mundo, cualquier gente, creyente o no, puede opinar
sobre el aborto, sobre los matrimonios homosexuales, sobre la eutanasia, y aquí
en México cualquier grupo religioso opina sobre esto e inmediatamente le
levantan una demanda”, dijo en entrevista con EL UNIVERSAL.
“Piensan que la Iglesia está contra determinadas leyes o autoridades, cuando
la realidad es que la Iglesia siempre ha defendido estas posiciones (sobre
aborto, matrimonios homosexuales, eutanasia), no se invita a la gente a que vote
o no por cierto partido. Si no respeta sus valores, entonces hablamos de
intolerancia”, dijo Aguilar.
El sacerdote habló sobre el conflicto que han tenido con el gobierno del
Distrito Federal en varios temas, como las bodas y adopciones gay.
Este domingo, el diario Desde la fe publicó en su Editorial que la actitud
del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, y de la Asamblea
Legislativa son propias de “talibanes laicistas”.
“Los problemas se podrían aminorar si hubiera diálogo, el problema es que hay
gobiernos que llegan a tener una actitud soberbia y piensan que tienen derecho a
pisotear a cualquier gente por ser autoridad.
“Una verdadera autoridad, sobre todo cuando quiere ser Presidente de la
República, tendría que tomar en cuenta a todas las personas, a todos los grupos,
no sólo a su grupo político y solamente a un grupo religioso”, contestó Aguilar.
Apuntilló:
“El gobierno debe ser respetuoso, no sólo con la Iglesia católica, sino con
cualquier credo religioso. El gobierno no puede tener injerencia en algo que es
a nivel personal”.
– ¿De qué forma tiene libertad de expresión la iglesia católica en la
capital?
– Hemos visto que cuando un obispo manifiesta un punto de vista religioso se
le ataca desde un punto de vista gubernamental, pensando que la Iglesia está
metiéndose en asuntos que no le incumben; entonces. ¿Dónde está la libertad
religiosa?
“Habrá que recordar que en México, durante mucho tiempo, se pisoteo este
derecho; fue hasta tiempos de (Carlos) Salinas de Gortari donde se empezó a dar
una libertad a la expresión religiosa, porque antes únicamente existía la
libertad de culto, y esto estaba restringido a las iglesias. Pero entonces ¿un
ciudadano no tiene derecho a expresar su fe, no tiene derecho a expresar los
valores que su fe emanan? Yo creo que sí.
“En México, el gobierno del Distrito Federal ha sido intolerante, no ha
tenido ningún acercamiento ni con la Iglesia católica ni con ningún grupo
religioso: musulmanes, judíos, cristianos; para tomar decisiones en las que
todos los ciudadanos de estas religiones deben ser tomados en cuenta.
“En este sentido, el periódico Desde la fe expresa, no lo que ha pasado
ahora, sino lo que ha pasado en los últimos años”.
– ¿Cambiaría la relación si el gobierno capitalino fuera de otro partido?
– Hemos tenido muy buena relación con el PRD en todo el país, sólo en el
Distrito Federal se tiene problemas con ellos, de hecho, cuando estuvo Andrés
Manuel López Obrador se tuvo una muy buena relación estando yo al frente de la
Catedral, porque había diálogo.
“Hay fieles que son del PRD, pero la Iglesia no apoya a ningún partido
político, el problema no es de partidos, sino de personas”.
– ¿La iglesia debería formar un grupo político?
– A la Iglesia católica no le incumbe hacer grupos políticos como parte de
sacerdotes, obispos, no sólo lo impide la Constitución, sino también el derecho
canónico. Lo que puede hacer es invitar a que los laicos se organicen y hagan un
partido, podría ser, que vaya de la mano con los valores predicados por la fe,
pero eso es a nivel de los laicos.
– ¿Pueden surgir grupos radicales?
– La Iglesia comenzó a ser atacada, lo único que hizo es defenderse, esta el
ejemplo de las incursiones a la Catedral. La Iglesia aguantó 20 incursiones, y
entonces protestó y cerró las puertas de la Catedral, cualquier grupo que ataque
la libertad religiosa no será bien visto.
– ¿La población pude sentirse influenciada por las declaraciones? –
Vivimos en un país donde la gente ya no se chupa el dedo, ahora los mexicanos
reflexionan, juzgan y toman sus propias decisiones, es una sociedad amplia,
plural y abierta, el derecho a la opinión no puede ser vetado por nadie.
