?Hermosillo.-En Sonora hay al menos 13 mil jóvenes que ?ni?
estudian ?ni? trabajan, llamados popularmente con el término de ?ninis?,
en un rango de 12 y 29 años, estimó el Instituto Sonorense de la
Juventud (ISJ).
El director del ISJ, José Everardo López Córdova, expresó que esa
condición de los jóvenes preocupa tanto al Instituto como al Estado, por
lo que se busca que el número de ?ninis? no se eleve en la entidad.
?El tema de los ?ninis? es una moda en España que no se ha adoptado
aquí, son jóvenes que no estudian ni trabajan, por eso los gobiernos de
inmediato se pusieron a trabajar y a ofrecerles espacios de desarrollo?,
aseguró.
El Gobierno estatal otorgó una bolsa de 50 millones de pesos etiquetados
para los jóvenes de 18 a 35 años, precisó López Córdova, con el
propósito de que iniciaran sus propias empresas con créditos de 125 mil
hasta 500 mil pesos.
Problema clave
Valentín Castillo Garzón, presidente de Coparmex, expresó que la falta
de oportunidades educativas y laborales es la razón fundamental de la
existencia de los ?ninis? en la entidad.
?Lo que sí es la realidad y ésa no la podemos ocultar es que hay una
cantidad muy importante de alumnos que dejan la universidad o que dejan
la preparatoria y que buscan la oportunidad, unos para seguir estudiando
y los que estudian para poder trabajar?, reconoció.
El sociólogo Marco Antonio López Ochoa opinó que es nece saria una
investigación del tema de los ?ninis? en Sonora, ya que la cifra de 13
mil jóvenes que no estudian ni trabajan debe ser preocupante para todos.
En busca de oportunidades Adrián, de 27 años, se convirtió en un ?nini?
por la falta de oportunidades en el mercado laboral que además lo
llevaron también a dejar la universidad, aunque durante años su destino
fue cuidar a su hijo.
En el 2006, el estudiante del octavo semestre de Derecho, quien contrajo
matrimonio, se topó con que sólo había trabajo en ventas, vendedores de
piso o guardias, lo cual no era lo que él esperaba.
Por casi dos meses laboró en Arizona, aunque al regresar se vio obligado
a cuidar a su hijo durante cuatro años, quien cursa el nivel preescolar
mientras él reanuda la entrega de solicitudes de empleo para darle un
mejor futuro a su pequeño.
