Tijuana, BC.- 15 migrantes centroamericanos, 11 adultos y cuatro niños que cruzaron la frontera de Reynosa, Tamaulipas a Estados Unidos y que las propias autoridades migratorias estadounidenses enviaron a San Diego, California, este martes fueron retornados a México por la frontera de Tijuana.
“No somos de aquí, somos de Honduras y venimos a Tijuana y sin un peso nos mandan, porque no nos dejan en Texas y nos mandan al país de uno, pero que venimos a hacer a Tijuana”, dice un tanto confundido Carlo.
Tres vuelos por semana desde hace unos días están partiendo de McAllen repletos de migrantes centroamericanos a San Diego, pero nunca les dicen que una vez en California serán retornados a México, relata Guillermo Caballero, quien viaja con sus tres pequeños hijos desde Honduras.
“Aquí nos iban a dar el permiso ahí en San Diego, pero luego no fue así, nos dijeron, ahora nos tiraron para México, no queríamos porque pues consideramos que es injusto pues, regresar al país sin dinero”.
Deberán permanecer por lo menos hasta septiembre en un albergue de Tijuana hasta su cita con un juez a quien le deberán solicitar el asilo, una posible estrategia del gobierno de Estados Unidos con el fin de desalentaros.
“Y me dan audiencia para mes y medio cada vez, entonces ya no definen nada y entonces ya mejor decidí regresarme para mi país”, dice Michell.
“El desanimo se ha incrementado bastante, ahorita las Naciones Unidas están apoyando para cualquier inmigrante que se quiera regresar para atrás a su país, se está coordinando a sus embajadas”, comparte el pastor Alberto Rivera, director del albergue migrante Ágape.
Según este grupo de migrantes, una vez en San Diego les notificaron que todos los que vayan llegando provenientes de Texas serán enviados a Tijuana, información que desconocen de manera oficial las autoridades del Instituto Nacional de Migración en México, por lo que fue una sorpresa cuando recibieron a estos 15 centroamericanos.