Ciudad de México.- Luis Felipe Bravo rindió protesta como candidato del PAN a la
gubernatura del Estado de México, con la promesa de encabezar un
movimiento cívico que libere a esa entidad de lo que consideró el
clientelismo, el patrimonialismo y el derroche de recursos de los
gobiernos priístas.
Arropado por tres secretarios de Estado, legisladores, dirigentes
panistas, así como de Diego Fernández de Cevallos y Luis H. Álvarez, el
ex dirigente nacional panista aseguró que su candidatura en la entidad
“va a mover almas”, no recursos.