Tailandia.- Hay quienes suelen enfrentar situaciones extremas e incluso arriesgar su propia vida para obtener una buena fotografía y presumir sus aventuras en redes sociales. Sin embargo, las cosas no salieron nada bien para un turista que cayó desde un tren a un acantilado en la provincia tailandesa de Kanchanaburi.
La víctima, un hombre neozelandés de 45 años, se encontraba de visita en la fascinante región que se ubica a unos 140 kilómetros de Bangkok, por lo que decidió hacer un recorrido en tren. No obstante, optó por abrir una de las puertas del vagón para tomarse una selfi, pero terminó resbalando y cayendo desde una altura de ocho metros mientras el tren cruzaba un puente.
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Al parecer, en este punto el tren había comenzado a disminuir su velocidad, pues se disponía a cruzar el puente de madera que mide unos 400 metros de longitud y desde cual se suelen tomar fotografías del río Kwai. Pero a pesar de encontrarse transitando mucho más lento, las condiciones no eran suficientemente seguras para abrir las puertas del ferroviario
La policía local informó que, cuando los equipos de rescate llegaron a la escena, el turista originario de Nueva Zelanda aún se encontraba con vida, por lo que los elementos procedieron a liberarlo de dicho lugar con ayuda de cuerdas y material especializado. No obstante, este terminó falleciendo a causa de los fuertes golpes sufridos en la caída.
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Es importante apuntar que la ruta tomada por el turista, que conecta Tailandia y Birmania, es conocida como el tren de la muerte, pues durante su construcción – entre 1940 y 1943 – se estima que entre 180 mil y 250 mil civiles del sudeste asiático y más de 60 mil prisioneros de guerra aliados fueron sometidos a trabajos forzados, de los cuales más de 100 mil murieron.
