Canadá.- Las Cataratas del Niágara son uno de los lugares más aclamados por los turistas, pues este sitio ofrece un espectáculo natural único y lleno de magia, el cual que atrae a más de ocho millones de visitantes al año.
Las cataratas se pueden apreciar desde Canadá o desde Estados Unidos, pero la diferencia radica en que desde territorio canadiense se puede observar más de cerca de la caída de agua y disfrutar de actividades de aventura, como la posibilidad de acercarse en barco y disfrutar de su estruendoso y magnífico espectáculo.
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Y es que, aunque la caída de las cataratas no es muy alta – solo 50 metros – el gran volumen de agua hace que el movimiento se realice con más fuerza y hasta haga vibrar el suelo. En particular, la Horseshoe Fall es la gran estrella de las tres cascadas, pues se trata de un arco de 670 metros de ancho por donde el agua turquesa cae con toda la furia levantando una nube de niebla.
En este punto es importante precisar que las del Niágara no son las cataratas más altas del mundo, ya que este título le corresponde al famoso Salto del Ángel, en Venezuela. E incluso existen al menos 50 por encima de ellas, pero lo cierto es que sí se reconocen por ser las que más agua mueven.
Se estima que sus tres saltos de agua – Horseshoe falls, American falls y Bridal Veil falls – las cataratas del Niágara movilizan unos 110.000 metros cúbicos de agua por minuto, unas 3.000 toneladas por segundo.
¿Cuánto vale la entrada a las cataratas del Niágara?
Una muy buena noticia es que la apreciación de las Cataratas del Niágara es completamente gratis. Además, hay un paseo peatonal hermoso que permite a los visitantes caminar a un lado de esta maravilla y capturar los mejores recuerdos.
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Sin embargo, lo que sí debe pagarse son las excursiones en barco que permiten acercarse a la caída del agua, el canopy y otras atracciones como ir por los túneles a la parte de atrás de las cataratas, todas estas actividades con diferentes precios y niveles de disponibilidad.
Toronto, por su parte, ofrece varios tours a Niágara que se pueden tomar en tren o en autobús, en verano el clima es muy agradable y todas las atracciones están abiertas, además que se ofrecen festivales y ferias. En invierno, por su parte, se puede disfrutar del festival de las luces por las noches que las convierte en un momento espectacular para visitar en familia.