Estados Unidos.- Este viernes 12 de abril, un tribunal de Ecuador declaró como “ilegal” y “arbitraria” la detención del exvicepresidente Jorge Glas, la cual ocurrió hace exactamente una semana, cuando policías irrumpieron a la fuerza en la Embajada de México con sede en Quito.
Sin embargo, el tribunal decidió dejar al exfuncionario privado de la libertad, ya que todavía tiene pendiente cumplir una pena de ocho años de cárcel por dos condenas vigentes emitidas anteriormente.
La Sala Especializada en Familia, Niñez, Adolescencia y Adolescentes Infractores de la Corte Nacional de Justicia de Ecuador, conformada por los magistrados Mónica Heredia, Liz Barrera y Adrián Rojas, consideró que se violaron los derechos de Jorge Glas al no cumplir el estado ecuatoriano el procedimiento contemplado en la normativa nacional para el allanamiento de misiones diplomáticas.
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No obstante, el tribunal denegó la petición del recurso de habeas corpus con el que Glas buscaba que se le anulara su detención y se le entregara a México u a otro país que le ofrezca asilo político. Es decir que el exvicepresidente seguirá recluido en la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil, donde fue ingresado la mañana del sábado 6 de abril tras su detención en la Embajada de México en Ecuador.
Durante su intervención, el personal jurídico explicó que el exvicepresidente salió de la cárcel en 2022 sin terminar de cumplir las condenas pendientes, bajo una polémica resolución judicial de medidas cautelares:
Correspondería disponer la inmediata libertad de la persona afectada, pero existen sentencias condenatorias de cosa juzgada.
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Sobre las condenas mencionadas en el tribunal, hay que señalar que una de ellas ocurrió en 2017, cuando Jorge Glas fue sentenciado a seis años de cárcel por asociación ilícita en el caso Odebrecht. Luego, en 2020, el servidor enfrentó otra condena de ocho años por cohecho en el caso Sobornos, sobre la financiación irregular del movimiento político correísta, en el que también fue condenado el expresidente.
