?Madrid.- España expresó el viernes su profundo malestar con Venezuela en la
polémica en torno a la supuesta presencia de etarras en el país
sudamericano, elevando de nuevo la tensión entre ambos gobiernos.
El detonante en esta ocasión fue una nota emitida el jueves por la
cancillería venezolana, en la que se calificaban de ”tendenciosas” las
declaraciones de varios ministros españoles al intentar ”asociar al
pueblo y al gobierno de Venezuela” con el grupo separatista vasco ETA,
un organización considerada terrorista en España.
”Existe un profundo malestar en el gobierno español en relación con la
nota de la cancillería (venezolana)”, dijo el vicepresidente Alfredo
Pérez Rubalcaba al término de la reunión semanal del gabinete.
”Entendemos que se vierten acusaciones inaceptables y que son
injustificables”.
Rubalcaba dijo que la canciller Trinidad Jiménez se puso en contacto con
el embajador de Venezuela en Madrid, Isaías Rodríguez, para trasladar
la postura del gobierno español ante el comunicado.
El vicepresidente, y ministro del Interior, insistió en que siguen
empeñados en mejorar la cooperación judicial y policial con Venezuela,
pero que el gobierno español no tolerará unas declaraciones que,
repitió, son ”inaceptables e injustificables”.
El origen de la polémica entre Madrid y Caracas es la investigación
judicial sobre los vínculos entre ETA y la guerrilla colombiana de las
FARC, bajo el supuesto amparo del gobierno de Hugo Chávez.
El mandatario venezolano siempre ha negado esta relación.
Recientemente, el gobierno español solicitó a Venezuela la extradición
del funcionario venezolano y presunto etarra Arturo Cubillas. Según el
juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, Cubillas fue el
intermediario en aquella colaboración ETA-FARC y está acusado de
tenencia de explosivos y pertenencia a banda armada.
Además, dos etarras detenidos en el País Vasco admitieron haber
participado en un curso sobre manejo de armas en Venezuela organizado
por Cubillas en 2008.
Cubillas declaró esta semana ante la fiscalía general venezolana por
esta investigación, aunque su testimonio no trascendió. En una
entrevista publicada en Caracas, Cubillas había desmentido su relación
con el adiestramiento de etarras y había admitido trabajar como
funcionario del Estado venezolano, sin especificar cargo.
Velasco citó a declarar a Cubillas el próximo 14 de diciembre en la sede
de la Audiencia Nacional en Madrid. El juez cursó la citación tras
recibir un poder notarial del sospechoso nombrando abogado en España, en
el que figuraba la dirección de su domicilio en Caracas.
ETA, que ha asesinado a más de 825 personas desde finales de 1960 en su
campaña por un País Vasco independiente de España, declaró una tregua
unilateral el 5 de septiembre.