Taiwán.- Este jueves 27 de junio el gobierno de Taiwán exhortó a sus ciudadanos a no viajar a China a menos que sea estrictamente necesario, esto debido a la aprobación de la nueva legislación que contempla la pena de muerte como forma de castigo de los separatistas de la isla.
El portavoz del Consejo de Asuntos Continentales de Taiwán, Liang Wen-chieh, informó que la advertencia se elevó a “nivel naranja” y solicitó a la población mantenerse alerta ante esta “grave amenaza para la seguridad personal”. Además, precisó:
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(…) si es necesario viajar a estos lugares, se recomienda evitar discutir temas y asuntos sensibles, tomar fotografías de puertos, aeropuertos o lugares militares y llevar libros sobre política, historia o religión.
Hay que recordar que el régimen de Xi Jinping anunció la semana pasada un cambio en su Código Penal, específicamente en el artículo seis, que amenaza con la ejecución de los “separatistas” taiwaneses que visiten el territorio chino.
El párrafo en cuestión refiere que quienes cometan el delito de “dividir el Estado” pueden ser condenados a la pena capital, si el crimen causa un “daño particularmente grave” al Estado y al pueblo, o si las circunstancias son “particularmente graves”, aunque no brinda detalles de qué se consideraría como tal.
La medida también habla de celebrar juicios en ausencia para los acusados y que si estos “abandonan voluntariamente” su postura, “ponen fin a sus actividades separatistas” y “toman medidas para mitigar o deshacer el daño y prevenir la propagación del daño”, entonces sus casos podrían ser desestimados.
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Estas modificaciones a la ley y la intensificación de las maniobras militares por parte de China han surgido luego de que William Lai asumiera su cargo como nuevo presidente de Taiwán, dejando claros sus discursos en tono independentista.
