Líbano. Equipos de rescate de la Armada de Líbano y fuerzas de paz de la Organización de Naciones Unidas (ONU) informaron que 230 migrantes que viajaban en una embarcación en el mar Mediterráneo y naufrago en costas de Trípoli, Líbano, fueron rescatados y finalmente deportados a su país de origen.
Se mencionó además que la mayoría de los migrantes era de origen siro y algunos palestinos, además de que durante el rescate, una mujer y su hijo perdieron la vida.
Luego de ser rescatados y llevados a tierra firme y de corroborar que su estado de salud fuera óptimo, los migrantes sirios fueron subidos a camiones del ejército de Líbano para ser trasladados al lado sirio de un cruce fronterizo extraoficial en Wadi Jaled.
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Testigos indicaron que una vez que estuvieron al otro lado de la frontera, los sobrevivientes del bote fueron interceptados por hombres con uniformes del ejército sirio que los llevaron a unos invernaderos de plástico donde los tuvieron cautivos hasta que sus familiares pagaron para que los liberaran.
Activistas señalaron que el caso de los sobrevivientes de los botes es un nuevo giro preocupante en los intentos de Líbano para que los refugiados sirios regresen a su país.