Roma. En una entrevista reciente, el Papa Francisco expresó su profunda preocupación por las políticas migratorias del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, señalando que si lleva a cabo su plan de deportaciones masivas, esto sería una “desgracia”.
Según el pontífice, este enfoque no resolvería los problemas y solo incrementaría la injusticia hacia los más vulnerables. En su opinión, el hecho de que las personas que no tienen nada sean las más afectadas muestra la ineficacia de tal medida.
El Papa también subrayó la importancia de la inmigración como solución a los problemas demográficos en países europeos con poblaciones envejecidas, como Italia y España. Recomendó que estos países recibieran a migrantes, resaltando que la clave para el éxito de la integración radica en ofrecerles un proceso de acogida y acompañamiento adecuado.
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En otro tema importante, Francisco abordó la situación de Oriente Medio, reiterando su apoyo a la creación de dos Estados, Israel y Palestina, como única solución viable para el conflicto en la región. La paz, según el pontífice, siempre será superior a la guerra, a pesar de las dificultades para alcanzarla.
Asimismo, el Papa celebró los avances en la inclusión de las mujeres en la Curia Vaticana, destacando varios nombramientos recientes, como el de Simona Brambilla, quien se convirtió en la primera mujer prefecta de un dicasterio del Vaticano. Además, destacó que las mujeres están desempeñando roles clave en la toma de decisiones dentro de la Iglesia.
En cuanto a la lucha contra los abusos, el Papa mencionó que se están logrando avances, aunque advirtió que un alto porcentaje de casos ocurre dentro del entorno familiar y en las calles, lo que subraya la importancia de continuar luchando contra esta lacra.
