Estados Unidos.- Un caso ocurrido en California está provocando desconcierto y conmoción a nivel internacional, pues se ha dado a conocer que una niña de apenas 3 años quedó con daño cerebral y tetrapléjica luego de atragantarse con una gomita dulce conocida comercialmente como “Candy Land Gummy Dot”.
Los familiares de la pequeña Amelie Paredes Sotelo interpusieron una demanda en contra de Frankford Candy & Chocolate Co., Frankford Candy LLC y Hasbro el pasado 28 de diciembre de 2023, alegando que los caramelos antes mencionados no vienen con suficientes advertencias.
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De acuerdo con la información compartida por la madre de Amelie para medios locales, la niña de 3 años solo mordió la mitad del caramelo, pero el dulce era tan pegajoso que bloqueó sus vías respiratorias y la obligó a ser trasladada de inmediato a un hospital.
Una vez en el centro médico, los especialistas tuvieron que usar una máquina especial para retirar la gomita, lo que resultó en un procedimiento tardado que hizo que la menor sufriera una grave falta de oxígeno, desencadenando así un daño cerebral permanente y cuadriplejía espástica. La mujer explicó para el canal ABC News 4:
El caramelo se había alojado en la orofaringe de Amelie, en la parte posterior de su garganta (…) No pudo respirar durante un período prolongado.
Ahora, como parte de la demanda, los familiares de la menor acusan a las compañías por la falta de advertencia, negligencia, imposición negligente de angustia emocional, entre otros aspectos. Y es que, según lo consignado en los documentos judiciales: estos dulces “se fabrican de una manera y mezcla que los hace irrazonablemente peligrosos, debido a su extrema pegajosidad y su incapacidad para descomponerse adecuadamente mediante la introducción de saliva humana”.
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Thomas Bosworth, abogado de la familia de la menor expresó en un comunicado:
Esos dulces eran una bomba de tiempo. Buscaremos justicia para esta niña inocente que alguna vez fue una niña vibrante y próspera, pero que ahora está permanentemente discapacitada, incapaz de hablar, tragar y moverse, por el resto de su vida.
