Estados Unidos. El pasado mes de enero, el condado de Los Ángeles sufrió una serie de incendios devastadores que arrasaron con miles de propiedades y dejaron pérdidas inmobiliarias que podrían superar los 30 mil millones de dólares, según un análisis reciente de Los Angeles Times.
De acuerdo al informe, los incendios de Palisades y Eaton fueron los focos más virulentos, con un impacto significativo en las áreas de alto poder adquisitivo. En el caso de Pacific Palisades, el 56 por ciento de las propiedades fueron destruidas, mientras que en Altadena, cerca de la mitad de las viviendas fueron reducidas a escombros. Se estima que el daño en este último barrio asciende a más de siete mil 800 millones de dólares.
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Entre las estructuras afectadas se encuentran al menos 79 mansiones en Palisades, cada una valorada en más de 10 millones de dólares, y más de dos mil 400 viviendas en Altadena, cuyo valor supera los 1.5 millones de dólares. Los daños son tan extensos que las agencias gubernamentales podrían enfrentar pérdidas de hasta 61 millones de dólares al año durante el proceso de reconstrucción.
Además de las pérdidas materiales, los incendios, que se extendieron por más de tres semanas, provocaron la muerte de al menos 29 personas y obligaron a evacuar a 150 mil residentes. Este desastre, uno de los más costosos de la historia de Estados Unidos deja un saldo de más de 16 mil estructuras destruidas, con un costo total estimado en hasta 272 millones de dólares.