Uruguay.- El expresidente de Uruguay, José Mujica, ha causado gran preocupación con sus declaraciones recientes, pues tras varios meses de llevar una lucha contra el cáncer de esófago, el político de 89 años ha revelado que la enfermedad se ha extendido a otras partes de su cuerpo y que cada vez se siente más debilitado.
Como parte de una entrevista para el semanario Búsqueda desde el living de su casa, y en compañía de su esposa, Lucía Topolansky, Pepe Mujica explicó que a pesar de que el tumor parecía haber desaparecido tras 32 largas sesiones de radioterapia, lo cierto es que la enfermedad sigue afectando su cuerpo y ahora coloniza también órganos como el hígado:
Te puede interesar: José Mujica, expresidente de Uruguay, es intervenido con éxito para implante en el esófago
El cáncer en el esófago me está colonizando el hígado. No lo paro con nada. ¿Por qué? Porque soy un anciano y porque tengo dos enfermedades crónicas. No me cabe ni un tratamiento bioquímico ni la cirugía porque mi cuerpo no lo aguanta.
El exmandatario, quien apenas a finales de diciembre se sometió a una intervención quirúrgica para la instalación de un stent en el esófago, agregó que no se someterá a ningún otro tratamiento para tratar la enfermedad, pues continuará adelante hasta que su cuerpo se lo permita:
Que me pichicateen y cuando me toque morir, me muero. Así de simple como te lo digo. Estoy condenado, hermano. Hasta acá llegué.
José Mujica aprovechó su conversación con el medio para “despedirse de sus compatriotas” enviando un abrazo a todos aquellos que siempre han simpatizado con sus ideas y que luchan desde los diferentes escenarios por la democracia. Además, aseguró que no dará más entrevistas y tampoco tendrá apariciones públicas:
Lo que pido es que me dejen tranquilo. Que no me pidan más entrevistas ni nada más. Ya terminó mi ciclo. Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso.
Sigue más noticias como esta en nuestra sección Internacional
Fue en abril de 2024 cuando José Mujica reveló al mundo que había sido diagnosticado con un cáncer de esófago, explicando personalmente que su caso sería “doblemente complejo” debido a “una enfermedad inmunológica” que padece desde hace 20 años y que dificulta “técnicas de quimioterapia o de cirugía”.
Posteriormente, en agosto, la médica tratante de Mujica afirmó que tras varias tomografías se confirmó que ya no hay evidencia del tumor, pero lo alentador de dicha noticia ha durado muy poco dadas las recientes declaraciones del expresidente.
