Brasil.- Este sábado 10 de agosto, un día después del trágico accidente aéreo que dejó 62 personas sin vida en Sao Paulo, Brasil, las autoridades finalmente han dado inicio a las labores para el retiro de los cuerpos, los cuales se espera sean entregados más tarde a sus respectivos familiares.
Desde el momento del siniestro y luego de que la aerolínea Voepass confirmara el devastador saldo de víctimas, las autoridades en todas sus estancias iniciaron las pericias en el lugar para determinar las posibles causas que llevaron al avión a sufrir una caída en picada tan impresionante.
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Según la agencia de noticias AFP, patrullas de policías, ambulancias y camiones de bomberos continúan entrando y saliendo del Residencial Recanto Florido, un condominio de casas enclavado en un apacible entorno arbolado en la localidad de Vinhedo, donde cayó el avión.
El portavoz de los bomberos explicó para el mismo medio que las labores se han visto incluso más retrasadas debido a las lluvias que han persistido desde la noche del viernes, sin embargo, un equipo de al menos 200 personas trabaja este sábado en la recuperación de los cuerpos, que serán trasladados a la morgue de Sao Paulo.
Además, se ha detallado que hasta el momento van 16 cuerpos recuperados de entre el amasijo de hierros en que quedó convertido el fuselaje del avión, mismo que el pasado viernes sufrió una caída brusca hasta los 4.100 pies (1.250 metros).
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Mientras tanto, el Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos de Brasil (Cenipa) ha dado apertura a una investigación para determinar las causas del accidente y ha recuperado la caja negra con los registros del vuelo para su respectivo análisis.