Amman.- Intensos enfrentamientos
surgieron el lunes en las afueras de Damasco, cuando tropas de elite del
Gobierno sirio apoyadas por tanques intentaron recapturar un suburbio
estratégico en manos de rebeldes en una de las mayores operaciones
militares vistas en el distrito en meses, dijeron activistas de
oposición.
Cinco personas, incluyendo un niño, murieron por el fuego del Ejército
que impactó a Daraya, dijeron activistas. El suburbio pertenece a una
serie de distritos musulmanes suníes interconectados que rodean la
capital de Siria y ha sido uno de los principales campos de batalla en
la revuelta de 21 meses contra el presidente Bashar al Assad, resaltó
Reuters.
“Este es el mayor ataque contra Daraya en dos meses. Una columna de
vehículos blindados intenta avanzar pero está siendo contenida por (los
combatientes del) Ejército de Siria Libre”, dijo Abu Kinan, un activista
de la oposición que hacía referencia al grupo rebelde.
Agregó que decenas de miles de civiles han escapado de Daraya durante el
asalto de Gobierno, pero que unos 5.000 residentes permanecían en la
zona, junto con cientos de rebeldes. Daraya está localizada cerca de la
principal carretera al sur que conecta con la frontera jordana a unos 85
kilómetros de distancia.
También se reportaron enfrentamientos cerca del aeropuerto en Aleppo, la
ciudad más grande de Siria, que está ubicada en el norte. Insurgentes
han convertido al aeropuerto en un objetivo con la esperanza de limitar
el acceso del Gobierno a Aleppo, que en gran parte está bajo control
rebelde.
Los rebeldes han ocupado vastos sectores del norte y el este de Siria en
los últimos seis meses, pero las fuerzas del Gobierno aún siguen
controlando el densamente poblado suroeste alrededor de la capital, la
principal autovía norte-sur y la costa del mar Mediterráneo.
El sábado, las fuerzas gubernamentales se adjudicaron una victoria al
expulsar a los rebeldes de Deir Baalbeh, un distrito en Homs, una
importante ciudad céntrica que bordea la autovía que une Damasco con el
norte y el Mediterráneo.
Batalla por Damasco
Se estima que más de 45.000 personas han perdido la vida en la guerra
que ya lleva 21 meses y constituye una de las revueltas más largas y
fatales que comenzaron en el mundo árabe hace dos años.
Los rebeldes -principalmente suníes musulmanes- están luchando para
derrocar a Assad, miembro de la secta minoritaria alauita cuya familia
ha gobernado Siria desde que su padre tomó el poder 42 años atrás en un
golpe de estado.
Activistas afirmaron que el Ejército está intentando replegar a los
rebeldes que han estado avanzando lentamente desde las afueras de
Damasco para acercarse a los distritos centrales del sector habitados
por la secta minoritaria alauí.
Las fuerzas de Assad han recurrido mayormente a bombardeos aéreos y a
artillería, en lugar de a sus fuerzas de infantería. Los rebeldes han
podido capturar numerosas localidades periféricas y se han enfrentado
con las tropas del Gobierno cerca del aeropuerto internacional de
Damasco, llevando a aerolíneas extranjeras a cancelar sus vuelos.
Otro activista en Damasco en contacto con los rebeldes y que no quiso
ser nombrado dijo que Daraya ha sido un zona de ataque para los
rebeldes, que usan morteros y proyectiles caseros.
Desde el distrito, los combatientes han podido impactar un enorme
complejo presidencial localizado en una colina y atacar a miembros de la
milicia shabbiha – que combate a favor de Al Assad – en un enclave
alauí cercano conocido como Mezze 86.
La oposición se niega a mantener negociaciones de paz a menos que Assad
renuncie al poder, y el éxito en el plano militar conseguido en los
últimos seis meses ha reforzado su fe en que pueden derrocarlo.
Sin embargo, tropas del Gobierno aún siguen superando a los rebeldes en
capacidad de fuego y mantienen bajo control bases dispersas en todo el
país.
Los distritos de Damasco se han convertido en uno de los frentes más
importantes de la guerra, ya que los rebeldes esperan finalmente llevar
el levantamiento a la capital, donde Assad nuclea su poder.NE