Estados Unidos.- Los señalamientos de que Irán podría estar suministrando misiles balísticos a Rusia han generado una oleada de reacciones entre la comunidad internacional, pues este martes 10 de septiembre Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania anunciaron una serie de nuevas sanciones en contra del país islámico.
En una rueda de prensa desde Londres, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, sostuvo que Irán suministró misiles a Rusia para usarlos “en las próximas semanas” en Ucrania, por lo que el país norteamericano tomó la decisión de imponer importantes sanciones, principalmente al transporte aéreo de la compañía nacional Iran Air.
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Mientras tanto, Francia, Alemania y Reino Unido emitieron un comunicado conjunto condenando “la exportación por parte de Irán y la adquisición de misiles balísticos iraníes por parte de Rusia”, decidiendo igualmente sanciones contra el sector del transporte aéreo.
Los líderes políticos anunciaron “pasos inmediatos para cancelar acuerdos bilaterales de servicios aéreos” con la República Islámica, afirmando que la venta de armas denunciada constituye “una nueva escalada del apoyo militar de Irán a la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania”:
Esta escalada, provocada a la vez por Irán y Rusia, es una amenaza directa para la seguridad europea (…) Trataremos de identificar entidades significativas e individuos involucrados con el programa de misiles balísticos de Irán y la transferencia de misiles balísticos y otras armas a Rusia.
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Esto ocurre mientras Irán insiste en rechazar las acusaciones, las cuales ha calificado como “información falsa y engañosa que busca encubrir el apoyo armamentista masivo e ilegal de Estados Unidos y ciertos países occidentales al genocidio en la Franja de Gaza”.