México. Las tensiones diplomáticas entre Estados Unidos y Colombia se intensificaron tras la decisión del presidente Gustavo Petro de bloquear dos vuelos de repatriación de migrantes colombianos indocumentados. En respuesta, el gobierno de Trump ordenó la suspensión inmediata de la emisión de visas en la embajada estadounidense en Bogotá, según anunció el Departamento de Estado en un comunicado.
El secretario de Estado, Marco Rubio, también impuso sanciones de viaje contra quienes participaron en la obstrucción de los vuelos, extendiendo esta medida a sus familias.
Washington calificó la negativa de Colombia como un obstáculo para sus operaciones de deportación, lo que llevó a tomar estas acciones como parte de su política de defensa de intereses de seguridad nacional.
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El Departamento de Estado subrayó que las medidas seguirán vigentes hasta que Colombia cumpla con aceptar el retorno de sus ciudadanos. Rubio destacó que la administración Trump no tolerará abusos ni mentiras, enfatizando que cada país debe hacerse responsable de sus ciudadanos en situación irregular.
Por su parte, el gobierno de Petro reafirmó su compromiso con la soberanía de Colombia y la defensa de los derechos humanos, mientras ambas naciones mantienen posturas firmes en torno al control migratorio y la seguridad fronteriza. Estados Unidos dejó claro que no dará marcha atrás hasta garantizar el cumplimiento de sus objetivos.
