Estados Unidos. El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, informó este viernes que el Gobierno norteamericano endurecerá las normas sobre los “accesorios” que convierte una pistola o revolver en armas largas, consideradas armas peligrosas.
Señaló que las pistolas modificadas serán sujetas a la misma normativa que las escopetas de cañón corto que, desde 1934, tienen que pagar impuestos y son sometidas a controles más estrictos que otras armas de fuego.
“Estas armas tienen una combinación mortal: son más fáciles de ocultar que los rifles y son más potentes que las pistolas”, afirmó.
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Mencionar que de acuerdo con el Departamento de Justicia, desde 2015 se han vendido al menos tres millones de estabilizadores o accesorios, por lo que sus propietarios disponen ahora de 120 días para denunciarlos ante las autoridades sin pagar impuestos.
De igual manera, los usuarios, pueden quitarlos de las pistolas en las que estaban instalados o alargar el cañón de esas armas para convertirlas en pistolas de verdad.
Asimismo, el grupo de presión “Gun Owners of America” anunció que planeaba emprender acciones legales para bloquear la medida.