El Vaticano. – Este es el primer discurso que León XIV, dio al mundo después de ser elegido Papa de la Iglesia Católica por el cónclave tras el fallecimiento de Francisco.
Es el segundo Papa del continente americano, después de Francisco.
“La paz esté con todos ustedes, queridos hermanos y hermanas y buen pastor que ha dado la vida por el rebaño de Dios también yo quisiera que este saludo de paz llegue hasta sus corazones, les alcance a sus familias a todas las personas donde quiera que se encuentran, a toda tierra, la paz este con ustedes”, fueron las primeras palabras que mencionó ante el mundo.
El sumo pontífice continuó con “una paz desarmada y una paz desarmante y perseverante que proviene de Dios que nos que ama a todos incondicionalmente”.
Durante su primer discurso el papa León XIV, visiblemente emocionado, siguió “todavía conservamos en nuestros oídos esa voz débil pero siempre valiente del papa Francisco que bendecía a Roma. El Papa que bendecía a Roma, daba también la bendición al mundo entero, esa mañana del día de pascua. Permítanme dar continuidad esa bendición, Dios ama a todos y el mal no prevalece.
Estamos todos en las manos de Dios, por lo tanto, sin miedo unidos mano de la mano con Dios y entre nosotros vamos adelante seamos discípulos de Cristo, Cristo nos precede, el mundo necesita de su luz. La humanidad necesidad de él como el puente para ser alcanzado por el amor de Dios.”
El santo padre pidió también ayuda para seguir construyendo puentes de diálogo entre las comunidades. “Ayúdenos también ustedes a construir puentes con el dialogo uniéndonos todos para ser todos un solo pueblo en paz”.
Durante su discurso, León XIV se tomó un momento para agradecer a su predecesor, Francisco.
“Gracias al papa Francisco quisiera agradecer también a todos los hermanos cardenales que me han elegido como el sucesor de San Pedro y caminar con ustedes siempre en la justicia, la paz, trabajando siempre como fieles, hombres y mujeres y a Jesucristo para promover la paz y para ser misioneros”.
“A la iglesia de Roma un saludo especial tenemos que buscar como ser una iglesia misionera, una iglesia que construye puentes de diálogo, siempre abierta como esta plaza, siempre abierta para todos aquellos que tienen nuestra presencia de dialogo y amor.”
Un emotivo momento se vivió cuando habló en español para hablar directamente con su diócesis.
“Y si me permiten un palabra y un saludo a todos aquellos en modo particular a mi querido diócesis de Chiclayo en el Perú donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto para seguir siendo iglesia fiel de Jesucristo.”
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“A todos ustedes hermanos y hermanos de Roma, de Italia, de todo el mundo queremos ser una iglesia que camina, una iglesia que buscar siempre la paz, que busca siempre la caridad, que busca siempre estar cerca de quienes sufren.
Hoy el día de la virgen de Pompeya nuestra madre María quiere caminar siempre con nosotros, estar cerca de nosotros, ayudarnos con su intercesión y su amor, ahora quisiera rezar con ustedes, por esta nueva misión por toda la iglesia por la paz en el mundo y damos esta gracia especial de María nuestra madre”.
Después de su discurso el Sumo Pontífice rezó el Ave María e impartió su bendición apostólica a la gente presente en la plaza y a todo el mundo.
